Toros

El Cid y Castella triunfan en la penúltima de la Feria de Hogueras

  • El sevillano y el francés salen a hombros de la plaza de Alicante · Rivera Ordóñez 'Paquirri' consigue un trofeo · Mano a mano ganadero, tras un baile de corrales

GANADERÍA: Se lidiaron tres toros de Zalduendo (primero, de gran calidad; tercero, muy bueno, y quinto, noble), uno de Carmen Lorenzo (segundo, manejable), y dos de San Pelayo (cuarto y sexto, a menos). En conjunto, de muy desigual presencia. TOREROS: Francisco Rivera Ordóñez 'Paquirri', oreja y silencio. Manuel Jesús 'El Cid', oreja y oreja. Sebastián Castella, dos orejas y ovación tras petición. Incidencias: Plaza de toros de Alicante. Alrededor de media entrada.

La corrida del día del patrón en Alicante acabó en un mano a mano ganadero tras un intenso baile de corrales. En ese improvisado duelo ganó sin duda Zalduendo a los astados del Capea. Y entre los espadas, con El Cid y Castella a hombros, lo de mayor peso artístico de la tarde corrió sin duda a cargo del francés ante el tercero del festejo. Paquirri también tocó pelo.

El incesante baile de corrales durante dos días puso en serio peligro la celebración del festejo. Al final hubo entente al mediodía y se lidiaron tres toros de Zalduendo -la divisa titular de la que curiosamente embistieron los tres- y otros tres de Capea, que lucieron dos de los hierros de la casa y que se emplearon menos en las telas.

El primero de la corrida del día grande de Hogueras lució hierro y divisa de Zalduendo. Y fue un gran toro. Por clase, calidad y duración, de los mejores de la feria, si no el que más. Con él, Paquirri cuajó una de las labores más templadas y confiadas que se le recuerdan en los últimos tiempos. Lució en los tres tercios el diestro -correcto con los palos-, que con la muleta llegó a torear despacio y relajado por ambos pitones ante un rival para soñar el toreo. Media estocada y un golpe de verduguillo no impidieron que el mayor de los Rivera paseara un trofeo.

Lució el hierro de San Pelayo el quinto, un zambombo de murube bonito por delante que no rompió de salida pero que en la muleta desarrolló una noble condición mientras duró, que fue poco. Paquirri, siempre en el tercio, trató de hilvanarle faena pero todo resultó una quimera. Lo cazó al segundo intento.

El Cid vio cómo su primero, de Carmen Lorenzo, manseó de salida. Pese a ello el torero de Salteras aprovechó en el último tercio su pastueña condición, pese a que el de Capea tendía a reponer entre muletazo y muletazo. Labor que alternó el toreo clásico con otros recursos más de cara a la galería y que tras una buena estocada fue premiada con un trofeo.

El Cid pechó en su segundo turno con un toro más feo de hechuras pero que también colaboró para el triunfo con su matador. El saltereño toreó mejor con la zurda que con la derecha, mostrando el corte más recio de su toreo y hubo naturales que tuvieron especial largura y mando. Estocada caída para amarrar la oreja y la consiguiente puerta grande.

El tercero, de Zalduendo y más armado que sus hermanos, fue recibido de capa con facilidad por Castella, que principió la faena con tres estatuarios y dos remates por abajo de cartel. Otro buen toro de la divisa extremeña con el que el diestro francés cuajó un trasteo de perfecta estructura y medido metraje. Templado, largo y profundo en las primeras series. Valiente, firme y poderoso en la parte final. Estocada hasta las cintas y dos orejas.

Cerró la función otro ejemplar del maestro salmantino que tampoco se empleó en los primeros tercios de la lidia. Sin probaturas, Castella se fue a los medios, donde brindó al público y puso en liza sus habituales pases cambiados por la espalda. Tuvo nobleza el de San Pelayo y el diestro galo brilló especialmente en una tanda sobre la zurda y en otra a diestras que inició con el pase de las flores. El final de trasteo, muy metido entre los pitones, tuvo la firmeza de siempre pero la falta de emoción de un rival muy venido a menos. Lo mató de pinchazo y estocada acompañado de un golpe de descabello. La petición, no mayoritaria, no fue atendida.

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