La plaza de toros de La Línea casi se llenó ayer en la novillada sin picadores del ciclo andaluz de escuelas taurinas. Un festejo en el que seis jóvenes aspirantes demostraron ganas, valor y afición.

Y es que los novillos de El Torero ofrecieron un buen juego, muchos de ellos tuvieron calidad, transmisión y sobre todo nobleza.

Miguel Pacheco, de la escuela de La Línea, paseó las dos orejas de su novillo tras una buena faena en la que destacaron varias series por el derecho. Un novillo bueno por los dos pitones y que el alumno de Landrove supo aprovechar. Cayeron las dos orejas y una vuelta al ruedo triunfal ante sua afición.

Tampoco se quedó atrás Diego Luque, también novillero de La Línea, pero inscrito en la Escuela Municipal de Algeciras. A Luque se le ve preparado para debutar con caballos. Cuajó a su novillo con el capote. Y luego con la muleta construyó una faena por ambos pitones con detalles de buen toreo. Oficio y temple tiene y lo demostró ante el de El Torero.

Y además Luque tiene el ingrediente de que quiere ser torero en este mundo tan difícil del toro. La pena fue la espada, tras una estocada delantera el novillo no cayó. Luego vinieron los pinchazos y se le esfumaron las dos orejas. Paseó una ante la entrega de su afición.

José Antonio Lavado, de la Escuela de Málaga, cortó las dos orejas de su novillo, tras un trasteo con cabeza y donde destacaron varios pasajes por el pitón derecho.

También tocó pelo Rubén Martínez, de la Escuela Taurina de Almería, y Miguel Andrades,de la Escuela Taurina de Jerez. Ambos cortaron una oreja, aunque pudieron ser dos de no haber fallado con la espada. Algo igual le pasó a Rafa Serna, de la Escuela Taurina de Sevilla.

Tarde de ilusiones y ganas en La Línea la que vivieron los aficionados linenses, con jóvenes valores que se juegan su futuro en este escaparate de las novilladas de escuelas con televisión incluida.