El Hotel Vincci La Rábida, uno de los mentideros taurinos de Sevilla, ha sido el escenario de la tercera de las presentaciones del abono de verano de El Puerto, ante un numeroso auditorio de profesionales de la información taurina y turística, así como de aficionados y profesionales.

Tomás Entero Martín intervino en nombre de la UTE adjudicataria de la explotación de la plaza de toros de El Puerto, responsabilidad para la que cuenta como lugartenientes a Juan Carlos Beca Belmonte y José Ortega Cano.

Tras la proyección del clip "El Puerto, la sal del toreo" -que con gran creatividad define la oferta de carteles y la identidad corporativa de la nueva empresa y que marca una nueva política de comunicación e imagen de El Puerto- intervino Tomás Entero para definir las claves de un ciclo que en esta edición se prolongará durante un mes, pero que se espera por el sector taurino local que vuelva a crecer hasta alcanzar el número amplio de festejos ofertados en tiempos de Canorea y Barrilaro, Justo Ojeda o los primeros años de la empresa Serolo.

Sin embargo Entero no mira al pasado: "es tiempo de mirar hacia delante" y explicó las circunstancias y dificultades de componer unos carteles para fechas dominicales en agosto disponiendo de muy poco tiempo para ello.

Puso en valor uno de los principales ingredientes para el verano taurino portuense, las novilladas que ponen prólogo y epílogo al abono, dos carteles que definió como "la apuesta por el futuro, por su calidad y su bajo precio para el aficionado".

Y es que la empresa ofrece dos novilladas con ganaderías de cotización como son Torrestrella y Juan Pedro Domecq a precios muy competitivos,: 20 euros sombra y 10 el sol. También añadió Entero que una de sus líneas de trabajo que iniciaba este año y apuesta por el futuro son las funciones nocturnas.

El alcalde Alfonso Candón cerró el acto explicando que el próximo años 2015 la Feria de Primavera y del Vino Fino estará dedicada a Sevilla, ciudad hermana dijo. Igualmente se valoró en la copa posterior que una parte nada desdeñable del público de la Plaza Real está formado por aficionados sevillanos que han de reencontrase con su otra plaza.