Aunque el actual Gobierno -Partido Popular- declarase la tauromaquia como Bien de Interés Cultural, el Proyecto de Ley General de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2016, aprobado el pasado viernes por el Consejo de Ministros y que se presentó ayer por el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristobal Montoro, no contempla ni un euro para la Fiesta y eso que la partida destinada a Cultura aumentará un 7,3 % con respecto al año anterior, lo que supone 803,5 millones de euros.

El Ministerio de Cultura, en el que está encuadrado los Toros, no aportará dinero público para ninguna disciplina relacionada con el toreo; ni siquiera para conservar el patrimonio de las plazas de toros, cuya titularidad en su mayoría pertenece a las Comunidades Autónomas. Desgraciadamente -como intuíamos en su día en un artículo de opinión, en el que lo denunciamos como papel mojado- el Plan Estratégico Nacional de Tauromaquia(PENTAURO), que contemplaba un 1,5% cultural para la tauromaquia, se lo han saltado a la torera.

Todo sería razonable si fuera por recortes o no existieran subvenciones para casi todo. Pero, curiosamente, las subvenciones han crecido y en algunos casos de manera muy ostensible con respecto a años anteriores. Así, la dotación al Fondo de Protección a la Cinematografía crece un 64% -unos 60 millones de euros-, que se suma al incremento para el Cine, que alcanza los 74,54 millones de euros. El teatro crece un 0,8%, llegando a los 53,56 millones.Y aumentan otras partidas destinadas a Archivos (6,5%), Bibliotecas (2,1%), Biblioteca Nacional (2%), Museos (5,46%), el museo Thyssen (12,9%), Música y Danza (2,31%) y Teatro (0,76%).

Hay otras muchas más partidas. Y lo curioso, es que la Fiesta de los toros, con el rimbombante calificativo de Bien de Interés Cultural, no recibe ni un euro como tal.