El tercer encierro de los Sanfermines, celebrado en Pamplona, en el norte de España, fue largo y peligroso y se saldó con dos personas heridas de gravedad por asta de toro. Se trata de dos hombres de 32 y 35 años que fueron corneados por un toro que quedó desperdigado de la manada durante la carrera que tiene lugar por las calles del centro histórico de la ciudad y en la que decenas de mozos corren delante de los toros.

Uno de ellos, el más joven, procede de Chicago (Estados Unidos) y recibió una cornada en el muslo derecho. El otro es español y fue herido en el tórax. Ambos tuvieron que ser intervenidos en el quirófano, según el parte médico recogido por medios españoles.

Otras tres personas fueron atendidas en el hospital por traumatismos y contusiones de carácter leve.

La carrera duró tres minutos y 22 segundos, casi un minuto más que la que se celebró el lunes dando inicio a los encierros de las conocidas fiestas en honor a San Fermín. Fue un encierro peligroso porque en un momento del recorrido la manada se dispersó y uno de los toros quedó suelto, provocando momentos de tensión entre los mozos y arrollando a algunos a pocos metros de la plaza de toros, donde termina la carrera y ya por la tarde se celebra la tradicional corrida.