ASOMAN sensaciones interesantes en la mañana de hoy en torno a La Merced. No es feria veraniega, pero el ambiente de toros se deja ya sentir en plenitud a pocas horas de que se abran esta tarde las puertas del coso onubense y arranque el primer paseíllo de los dos anunciados.

Importante motivo el que los impulsa e importante el ambiente con el que esta provincia se ha puesto en movimiento para colaborar a que el balance final se traduzca en una sólida muestra de compromiso con el Banco de Alimentos onubense, la entidad a la que va dirigido este esfuerzo común, que parte principalmente de la empresa de la plaza de toros onubense y muy singularmente del hombre que ya el año pasado decidió comprometerse sin tapujos con esta ciudad: el ganadero José Luis Pereda García. Suya fue la idea de crear este ciclo de novilladas en forma de clase práctica y ahora, cuando se alcanza esta segunda edición, los retos están dirigidos a superar cuanto de bueno sucedió el pasado año. Retos que pasan por superar la recogida de alimentos del pasado año, pero también el de que ese esfuerzo, que supone poner en marcha dos festejos taurinos, se vea recompensado con la mayor presencia de público posible.

Y si la figura del ganadero está ahí en cuanto a la parte generosa, la logística y todo el trabajo de poner en funcionamiento la plaza recae en manos de Óscar y Carlos, los actuales empresarios de la plaza mercedaria.

No pesa el trabajo. En la plaza se trabaja a destajo para hacer desaparecer los restos del último evento, mientras que las opiniones de ambos sustentan la parte principal de este reportaje que pretenden recordar que hoy se inaugura en la plaza de la capital, la temporada taurina.

Para Óscar Polo, una oportunidad más de fomentar afición.

"Es un buen motivo para alegrarnos de que la plaza vaya sumando poco a poco fechas taurinas. Vamos en esa línea de buscar motivaciones para hacerlo y ésta que hoy nos brinda la oportunidad de abrir las puertas al aficionado es desde luego una de las mejores que podíamos haber encontrado. Por eso siempre he dicho en estos días previos, que todo esto nos tiene enormemente orgullosos como empresa. Orgullosos, porque es verdad que habilitar la plaza para un espectáculo público ya tiene de por sí un enorme trabajo porque hay que coordinar a todas las partes como un día normal de toros, y no es poco, pero cuando miras al final, el motivo por el que hemos llegado hasta aquí, la sensación es tremendamente bonita. Es de esas ocasiones donde ser solidario te deja un regusto especial, y al mismo tiempo hay doce chavales que seguro que llevan soñando también con esta plaza desde que se anunciaron en los carteles. Ser solidario y hacer afición son, como digo, dos buenas razones para estar aquí".

Al pie del cañón anda también estos días Carlos Pereda. El ruedo, el ganado que ha llegado a las corraletas de la plaza, las taquillas, atender a los distintos medios. Todo forma parte de una semana desde la que se intuye esa sensación de que el proyecto ha comenzado a hacerse presente entre la propia ciudad y su provincia. No hay que olvidar el que dos toreros de la tierra hacen el paseíllo en la misma tarde.

"La idea -argumenta Carlos- es que la plaza se llene de gente porque es la forma de que el proyecto se cuaje en todos los sentidos. Me gusta abundar en esa doble vertiente de solidaridad hacia quienes lo necesitan y en la de hacer afición, porque es importante. Tanto Óscar como yo tenemos sensaciones muy bonitas en cuanto a lo que puede acontecer porque el ambiente que nos llega es precioso. Se han retirado un montón de invitaciones, los chavales están superpreparados para ponerse delante de dos novilladas con importancia y además tienen a sus respectivas aficiones en pie de guerra. Guerra de la buena, de la que sirve para que todo esto camine en la dirección correcta. Tenemos noticias de que Rociana se va a movilizar con su torero, que hay autobuses dispuestos para seguirle hasta Huelva, que Juan Ramón Jiménez también tiene una parte muy importante de seguidores, que los chavales de Sevilla también van a arrastrar hasta Huelva a muchos aficionados, y bueno, esto es lo que queríamos conseguir".

Este año el ciclo se condensa en un mismo fin de semana, algo que le ha dado también un apresto muy especial, sin que llegue a difuminarse de una semana a otra, y además se ha visualizado también con respecto a la provincia a través de la gestión de la red de oficinas de Caja Rural, que ha propiciado el poder conseguir la invitación para poder acceder a la plaza.

A diferencia del año pasado no se ha exigido un numero mínimo de kilos de alimentos para conseguir la entrada, sino que los organizadores han dejado abierta esa puerta a la decisión personal de cada uno de los asistentes al festejo.

"No nos preocupa nada ese aspecto -comenta Óscar Polo- porque la gente ha demostrado ser más generosa de lo que uno puede llegar a pedirle. A la esperanza y la solidaridad que uno regala no se le puede poner precio, pero estamos seguros de que el año pasado quien depositó su donativo lo hizo en la mayor parte de los casos por encima de esos tres kilos de alimentos que se pedían en la entrada".

Ambos festejos están programados para las seis y media de la tarde y esta tarde se abre el ciclo con ese conjunto de erales que desde tierras portuguesas ha embarcado el ganadero José Luis Cochicho.