La serie Hitman no es una desconocida dentro del mundo de los videojuegos. Después de cuatro intensas entregas donde se nos presentó al Agente 47, protagonista absoluto de la franquicia, la desarrolladora danesa IO Interactive ha decidido trasladar su concepto de juego al mundo de la alta definición con un resultado francamente sobresaliente. Seis años separan este Hitman Absolution desde su última entrega, Blood Money, y mucho ha cambiado con respecto a este último título, gracias, en gran parte, a las posibilidades que ofrecen los avances tecnológicos en cuanto a motores de juego. Las bases de este Absolution son exactamente idénticas a las de sus antecesores, pero la puesta en escena, la mejorada jugabilidad y su perfección a la hora de presentar un mundo vivo en el que cumplir arriesgados contratos a sangre fría han hecho que este Hitman Absolution sea uno de los títulos imprescindibles del año, seamos seguidores de la serie o no.

La trama principal de la aventura nos devolverá a la piel del Agente 47, un letal asesino modificado genéticamente que trabaja como sicario para una agencia mundial que destina sus recursos al asesinato de personas clave en el mundo. El último contrato para nuestro protagonista no será otro que el de eliminar a Diana Burnwood, la contacto de 47 en la agencia, acusada de alta traición al secuestrar a una joven llamada Victoria, cuya presencia es la clave principal en la trama.

Nuestra aventura comenzará adentrándonos en la mansión de Diana, donde nuestro objetivo es recuperar el objetivo -Victoria- sano y salvo, en un nivel que servirá de tutorial para familiarizarnos con el control y estilo de juego. El juego no está exento de giros argumentales, secuencias cinematográficas al más puro estilo blockbuster de Hollywood y acción por doquier, elementos que se funden perfectamente en la obra ofreciéndonos una experiencia de juego sobresaliente desde el primer minuto.

Es de agradecer que se haya hecho especial hincapié en la trama de la aventura, ya que ésta suele ser descuidada por la gran mayoría de desarrolladoras que prefieren centrar sus esfuerzos en ofrecer un sistema de juego dinámico y adictivo. Hitman Absolution es un claro ejemplo de que se puede mimar tanto la parte narrativa del título como su eje jugable, cohesionándolas de manera brillante para mantenernos pegados al televisor durante un buen rato.

Así pues, Hitman Absolution recoge el testigo de los antiguos títulos y aprovecha el hardware de las videoconsolas actuales para ir un paso más allá, ofreciendo nuevas dinámicas jugables y presentando un concepto de juego muy atractivo, tanto para los fieles seguidores como a los recién llegados.

Hitman, el asesino silencioso

Pese a que el videojuego puede parecer un título de acción, la serie siempre se ha caracterizado por premiar el sigilo frente a la acción. Si bien es cierto que usaremos un buen arsenal de armas de fuego y arrojadizas -como cuchillos-, el diseño de los niveles está pensado para que podamos completarlos sin tener que derribar a ningún oponente, por lo que será el jugador el que decida cómo quiere realizar las misiones que nos encomienden.

Como decíamos, comenzaremos en un primer nivel donde nos enseñarán lo básico para sobrevivir: pasar desapercibido, realizar bajas de manera silenciosa, esconder los cadáveres para no levantar sospechas, disfrazarnos, etcétera. Todos estos elementos están perfectamente mezclados para ofrecernos una variedad de situaciones pocas veces vista en un videojuego, ya que a lo largo de las 20 fases de las que se compone el título tendremos la posibilidad de realizar las tareas de una manera u otra, haciendo que cada partida sea diferente a la anterior. Escapar de un edificio en llamas, sortear los disparos de un helicóptero o encontrar a nuestro objetivo entre la multitud serán varios de los objetivos que nos encontraremos a lo largo del juego. Pero ser un asesino silencioso cuesta trabajo, y la desarrolladora ha puesto una serie de herramientas a nuestros pies para que nuestra experiencia con el videojuego sea lo más positiva posible.

En primer lugar, y teniendo como base que nuestra intención es evitar bajas innecesarias, contaremos con el instinto de 47, que servirá para descubrir los elementos importantes del escenario -como cuchillos, interruptores, etcétera- y localizar a posibles enemigos más allá de nuestra situación actual. El instinto será una pieza fundamental dentro de la obra, ya que con ella podremos pensar estrategias inteligentes antes de llevarlas a cabo. Además, también nos servirá para realizar tiros estratégicos, es decir, parar el tiempo durante unos segundos para marcar a los objetivos y realizar tiros rápidos para neutralizar a varios enemigos a la vez. Hay que tener cuidado con nuestro instinto, ya que no es ilimitado y únicamente se recargará a medida que completemos objetivos, pase el peligro una vez hayamos sido descubiertos, dejemos inconsciente a algún enemigo, etcétera.

Por otra parte, otro de los elementos fundamentales será camuflarnos con el entorno, recogiendo las ropas de nuestras víctimas -o encontrándolas en diversos puntos de la fase- para pasar desapercibidos ante ojos enemigos. Los disfraces no son perfectos, ya que los enemigos que lleven nuestro propio uniforme -por ejemplo, los de guardia de seguridad- dudarán sobre nuestra identidad si pasamos demasiado tiempo a su alcance. Además, cambiándonos de traje accederemos a diversas zonas restringidas sin levantar sospechas, aunque si nuestro cometido es evitar levantar sospechas lo mejor es no dejarse ver en ningún momento.

No obstante, también tendremos la posibilidad de realizar las misiones a bocajarro, es decir, olvidándonos completamente del sigilo entrando directamente a la acción desenfrenada desde el primer momento. Sin embargo, el elemento característico de la serie es el sigilo, así que para evitar hacer del juego un título de acción más, la desarrolladora ha colocado en cada fase un marcador donde aparecerá nuestra puntuación de nivel en todo momento, que aumentará en función de nuestro nivel de sigilo y disminuirá a medida que seamos descubiertos, realicemos bajas innecesarias, matemos por placer, etcétera. Así pues, asesinar a un enemigo supondrá una penalización, pero esconder su cadáver aumentará nuestros puntos, y así con la gran mayoría de situaciones, obteniendo, al final de cada nivel, un registro con todos nuestros movimientos y la puntuación final.

Este marcador condiciona al jugador y lo obliga, al menos por una vez, a plantearse el repetir un nivel intentando mejorar su marca, algo que aumenta la rejugabilidad de la obra hasta límites insospechados. Además, también referente a la rejugabilidad del título, la desarrolladora ha incluido multitud de trajes, objetos importantes y pruebas repartidas por todo el nivel, por lo que aquellos jugadores que quieran completar el videojuego al cien por cien pueden ver cómo su contador de horas de juego aumenta de manera desmesurada.

A medida que vayamos completando misiones y adquiriendo puntos mejorarán algunos atributos de nuestro protagonista automáticamente, como la duración de nuestro instinto, la velocidad de recarga de las armas, nuestro daño en el combate cuerpo a cuerpo, etcétera.

En otro orden de cosas, hay que aclarar que Hitman Absolution no es un videojuego apto para todo el mundo. Por suerte para muchos y desgracia para unos pocos, el juego es muy poco permisivo si seleccionamos un nivel de dificultad por encima del normal. De hecho, en el nivel Hitman -el último de todos-, no contaremos con ningún tipo de indicador -como el mapa del juego- o referencia que nos facilite la tarea, además de no disponer del instinto del protagonista para realizar ofensivas. La curva de dificultad es muy buena, y enseguida aprenderemos los conceptos para evitar perdernos en el mundo que presenta la desarrolladora. La obra se presenta como uno de los retos más complicados de la generación, y encantará a todos los jugadores que busquen un videojuego que les obligue a repetir una y otra vez los niveles para conseguir una puntuación perfecta.

Contratos para nuestros enemigos

Como no podía ser de otra manera, la obra cuenta con una vertiente multijugador para disfrutar con otros amigos a través de Internet. El modo competitivo es bastante curioso, ya que se aleja de las temáticas más frecuentes del género, como las batallas por equipos, en solitario, etcétera. La desarrolladora ha decidido profundizar en el tema de La Agencia para hacer un sistema de juego online mucho más acorde con lo visto en el modo historia, con un resultado notable en todos sus aspectos.

Se ha incluido, pues, un modo de juego en el que nosotros somos los que diseñamos los contratos a realizar, escogiendo el número de víctimas, los uniformes que habrá que ponerse y planeando una fuga antes de que la cosa se ponga demasiado peligrosa. Una vez realizada la misión -cuanto más complicada, mejor-, tendremos la posibilidad de compartirlo con nuestros amigos, superar sus puntuaciones, etcétera.

En cuanto a nivel técnico, Hitman Absolution se mueve francamente bien gracias a su motor gráfico Glacier 2, que permite que multitud de personajes se muestren en pantalla con un nivel de detalle bastante alto sin que la jugabilidad se resienta. Niveles como el del club de alterne o la huida en tren son muestras de ello, donde nos veremos superados en número y tendremos que sortear a nuestros enemigos camuflándonos entre la multitud, como si de un Assassin’s Creed se tratara. De la misma manera, el nivel de detalle del protagonista y los personajes importantes en la historia es excelente, con unos movimientos muy realistas y unas expresiones faciales que sorprenderán a más de uno.

Y lo mismo ocurre con el apartado sonoro, que cuenta con grandes piezas instrumentales que nos acompañarán perfectamente durante toda la aventura. La banda sonora se funde con nuestros movimientos en el juego, creando una atmósfera muy adecuada al ritmo que plantea la obra. No obstante, la parte más floja del apartado -y podríamos decir del videojuego- se la lleva el doblaje al castellano de la obra, que, comparada con el original, no queda muy bien parado. La mayoría de actores de doblaje implicados en la obra están bien seleccionados, caracterizando los personajes principales de la aventura sin problema, aunque hay un par de enemigos a los que la voz no les pega nada en absoluto, restándole veracidad a la historia. Por suerte, la obra cuenta con un selector de idioma -tanto de voces, como de texto-, para que el jugador juegue con el idioma a su gusto.

Hitman Absolution se presenta como uno de los imprescindibles del año, seamos seguidores de la franquicia o no. IO Interactive ha realizado un trabajo excelente trasladando el concepto de la serie a la alta definición, donde el Agente 47 y los demás protagonistas lucen espectacularmente bien. Un modo principal que nos durará entre las 15 y 20 horas, multitud de extras y secretos por desbloquear, una dificultad retante -y a la vez adictiva- y un modo multijugador pensado para la ocasión son los puntos fuertes de esta nueva entrega, que, sin ningún tipo de duda, es candidata a alzarse como una de las grandes de la actual generación. ¿Estás preparado para ser un auténtico asesino que actúa bajo las sombras?