El verde de las carpas de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) llenó ayer la ciudad de color y solidaridad en una jornada de cuestación dedicada íntegramente “para paliar las necesidades económicas de las familias que sufren el cáncer y se encuentran en situación de desempleo”, explica el presidente de la AECC en Granada, José Javier García Montero –hermano del poeta Luis García Montero y del ex concejal de Cultura Juan García Montero– e incide en que hay familias que se enfrentan a “una doble pandemia, el cáncer y el desempleo causado por el Covid”.

García Montero avisa de que el miedo de algunos enfermos a acudir al hospital en pandemia pueda conllevar que “cuando se normalice la situación, nos encontremos con una duplicación de casos en un estadio de la enfermedad superior” y destaca que la clave está en “la investigación y el fomento de la vida saludable.

¿Cómo colaborar en la lucha contra el cáncer? Desde una pequeña donación a formar parte del cuerpo de voluntarios, como es el caso de Sandra López, voluntaria que “tras sufrir varios casos en mi familia decidí involucrarme” y explicó que las personas que deciden involucrarse como voluntarias reciben formación específica para atender a los enfermos en sus hogares particulares o en las viviendas habilitadas por la asociación. El desempeño de estas labores se adecua a las necesidades y condiciones de cada voluntario “yo pedí participar en oncología infantil, pero tengo dos niños y decidieron que no debía enfrentarme a eso”, comenta Sandra.

“Atención psicológica, atención social y seguimiento telefónico en tiempos de pandemia para pacientes y familiares” así resume la actividad de la AECC Cristina Gutiérrez, voluntaria.

Siempre es buen momento para enfrentar al cáncer, pero ahora es más necesario que nunca.