En el periodo navideño de Granada y Andalucía, Juveándalus, con sus treinta y tres años de experiencia ya es casi una visita obligada para niños, y no tan niños, que quieren pasar un día entre atracciones y actividades de lo más originales.

Con una cifra que supera los 45.000 visitantes -la más alta de los últimos quince años, indica la organización-, Juveándalus sigue siendo "la ilusión de muchos, ya que cada año se conservan los clásicos más exitosos de todas las ediciones pero siempre incluyendo novedades que a nadie dejan indiferente".

Este año la tecnología ha tenido un lugar protagonista entre las novedades, como la realidad virtual, los videojuegos de última generación de Nintendo, o el circuito de coches eléctricos. Sin embargo, también se ha fomentado la creatividad y la actividad intelectual con actividades igual de novedosas como el scape room o los talleres de cocina para niños.

Tampoco han faltado los clásicos que siempre triunfan en Navidad, como los talleres de manualidades, la tirolina, los deportes o las colchonetas hinchables.

El objetivo principal por el que se ha trabajado en esta XXXIII edición de Juveándalus ha sido el de construir la igualdad entre géneros desde las edades más tempranas, algo que se ha conseguido a través de actividades sin estereotipos que han fomentado la participación de todos los niños y niñas. En esta feria, también se han puesto de manifiesto otros valores muy positivos como el cuidado al medio ambiente con talleres de reciclaje y la vida activa con actividades de danza, todo para que los más pequeños entiendan que se puede llevar un estilo de vida sano y respetuoso de una manera divertida.

Fuera de la parte más lúdica de Juveándalus, no hay que olvidar el impacto tan positivo que genera este evento en la economía granadina, en esta edición se han contratado más de 160 trabajadores, dando a muchos jóvenes de la provincia su primera oportunidad laboral.