Las asociaciones vecinales pasan una vez más a la acción ante el abandono institucional y la falta de civismo que causa la acumulación constante de residuos en la zona Norte de la capital. Implicadas en la mejora de la calidad de vida de las barriadas ha realizado una nueva batida en las carreteras abandonadas de La Azulejera, sobre el Parque Nueva Granada, donde han recogido hasta 1.400 kilos de basura en tan sólo una mañana.

El cierre de accesos desde la carretera entre Casería de Montijo y el Parque Nueva Granada acometido hace unos meses no ha sido suficiente y las basuras depositadas por los irresponsables se siguen acumulando en La Azulejera, puesto que algunos puntos de acceso siguen abiertos.

La Asociación Relámpago Verde, en colaboración con Asociación de Vecinos del Parque Nueva Granada, Caminantes Zero Waste, Granada Awakes, Amigos del Pantano del Cubillas y UGR Solidaria han decido tomar cartas en el asunto. Todas ellas han realizado la recogida de residuos a lo largo de una mañana.

En el evento por la mejora de las condiciones de la zona de paseo y ocio de los vecinos del Parque Nueva Granada y de la Casería de Montijo participaron un total de 21 personas, incluyendo un joven de 12 años que quiso sumarse a toda costa a la recogida en un día sin colegio.

Aspecto en la zona del mirador

La Asociación de Vecinos del Parque Nueva Granada puso a disposición de la batida todos los contenedores y bolsas de basura usados.

A la jornada de limpieza se unieron dos ciudadanos que paseaban por las calles abandonadas de La Azulejera y también trabajaron codo con codo con los vecinos algunos efectivos de Inagra, a los que desde las asociaciones implicadas se les ha agradecido la colaboración puesto que "se han portado muy bien".

Tras la recogida de los residuos, desde la asociación Relámpago Verde inciden en que la zona se hace cada vez más difícil de limpiar debido a la acumulación masiva de basura y el difícil acceso es el mirador. "Aquí no se trata de buscar culpables, sino de que la gente tome consciencia!", aseguran.

Dificultades notables para acceder a la recogida de residuos

La acumulación de basuras y sucesos en la zona, que debió ser urbanizada antes de la ‘crisis del ladrillo' consume la paciencia de los vecinos, que miran con recelo un área reutilizada como espacio de ocio y descanso a pesar de las insalubres condiciones que conlleva la acumulación constante de residuos.

Es cada vez más común que los propios vecinos se organicen para organizar recogidas de residuos ante la situación de abandono, que se prolonga ya desde hace más de una década.

Los residuos alcanzan hasta el barranco de San Jerónimo, al límite geográfico con el municipio de Jun. Durante el último verano, la basura acumulada quedó señalada como principal detonante de un incendio que se llevó por delante hasta 70 hectáreas de zona natural frecuentada por vecinos y conocedores de la belleza del lugar.

Resultado final de la batida realizada por los vecinos de la zona organizados desde diversas asociaciones