El entrenador del Atlético de Madrid, el argentino Diego Pablo Simeone, puso en la sala de prensa tras el partido una nota sobresaliente al "temporadón" que ha hecho su equipo después de que haya acabado la Liga en la tercera plaza gracias al empate sin goles logrado ayer ante el Granada (0-0) en el Estadio Nuevo Los Cármenes.

El preparador argentino no tuvo pelos en la lengua para reconocer que tanto colchoneros como granadinistas quisieron hacerse poco daño porque eran conscientes de que el resultado con el que empezó el partido era suficiente para que ambos conjuntos lograran sus objetivos y justificando la legitimidad de esta acción en lo hecho mejor que otros en los anteriores encuentros de la presente temporada.

"Dependíamos de nosotros y el Granada también de ellos, uno juega durante toda la temporada, no solo en el último partido, y como lo hicimos mejor durante el resto de la temporada existía la posibilidad de jugar cómo se jugó", explicó Simeone al respecto.

El técnico reconoció que "en un partido puede pasar cualquier cosa en cualquier instante, por lo que siempre hay que estar atentos, pero nadie quiso arriesgar para que no sucediera algo que no convenía a ninguno" añadió un Simeone al que se le vio muy feliz.

El argentino, que fue coreado desde la grada por los hinchas atléticos en diferentes partes del choque, insistió en que jugaron "con la sabiduría de saber" que un punto era suficiente para acabar la Liga terceros en la clasificación.

Simeone puso "un nueve" al "temporadón" firmado por los suyos destacando el "enorme trabajo de los futbolistas" y el "gran trabajo del club para sostener una estructura que mantiene a muchos jugadores desde hace años".

"Ahora hay que centrarse en el próximo año, en que vamos a jugar la Champions por tercer año consecutivo, lo que supone un gran éxito para todos los atléticos", apuntó.

"No se le puede pedir más a estos futbolistas, que están haciendo que el club y los aficionados se sientan orgullosos de ellos", sentenció el preparador rojiblanco ante los periodistas.