Economía

Heineken se vuelca con la cebada andaluza

  • Intermalta, su principal proveedor, busca agricultores para ampliar el cultivo en 20.000 hectáreas

Heineken acerca su producción a su zona de influencia. Su principal proveedor, Intermalta -con una fábrica anexa a la de la cervecera- impulsa un plan para extender el cultivo de cebada vinculado a Heineken en Andalucía occidental y Extremadura, que ya abarca 20.000 hectáreas. El objetivo es conseguir que el 100% de la cerveza que sale de la factoría andaluza tenga materia prima del sur. Y para ello Intermalta se ha planteado que, en uno o dos años, se llegue a las 40.000 hectáreas. "Estamos ahora en campaña de publicidad. Firmamos los contratos en cosecha y damos la seguridad de que los precios son los mejores que hay para la cebada de este tipo", señala Alfonso Itóiz, de Intermalta.

El de las compras locales -el 92% de los proveedores son españoles- es uno de los aspectos del plan de sostenibilidad Brindando un futuro mejor que Heineken lanzó en 2010. Ayer se presentó en Sevilla el informe de 2012, coincidiendo con el quinto aniversario de la inauguración de la fábrica.

La compañía continuó con su esfuerzo de reducción del impacto medioambiental en toda la cadena de valor, y redujo un 4,6% el consumo de energía, el 5,3% el de agua y el 8,1% las emisiones de CO2. Heineken ha determinado que se emiten 55 kilos de CO2 por hectolitro producido, y está empeñada en reducirlos. Por eso, por ejemplo, cada vez hay mayor uso de cartón reciclado y los envases son más finos. Y hay más ahorro: en el proceso de envasado ya se pierden dos millones de botellas y latas menos al año por algún tipo de problema. Y el final del proceso, cuando el sistema de refrigeración llega al bar, se usan isobutanos, gases menos contaminantes. El 93% de los equipos puestos recientemente en el mercado emplea esta fórmula.

El plan incluye la distribución del producto, y se espera que DHL -la empresa de transporte que trabaja con Heineken- reduzca un 20% sus emisiones hasta 2020. Y abarca aspectos no tanto relacionados con el medio ambiente como con la sostenibilidad en sentido amplio: a los trabajadores se les imparten 24.000 horas de formación al año y la accidentabilidad se ha reducido un 64% el último año. Bienestar laboral y seguridad son dos aspectos que Heineken integra en su plan. A ello se le suma el fomento del consumo responsable, que incluye acuerdos publicitarios de todo el sector con la Dirección General de Tráfico (DGT); o convenios con ayuntamientos para habilitar autobuses gratis en eventos donde se consuma.

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