España

Libia libera a Manu Brabo y a otros tres periodistas

  • Tras pasar más de un mes de cautiverio, el reportero gráfico español y sus colegas de profesión ya están a salvo en el hotel Rixos de Trípoli.

Ha pasado más de un mes desde que un fotoperiodista y su familia experimentaran la terrible sensación de que la vida depende de un mandatario extranjero que ha declarado la guerra a su pueblo, pero finalmente Manuel Valera de Seijas Bravo, o Manu Brabo -como él mismo firma-, ha sido liberado en Trípoli. El régimen de Muamar Gadafi ha ofrecido una rueda de prensa para mostrar a Brabo y a los otros tres periodistas ya liberados con los que fue detenido el pasado cinco de abril en la zona de Brega. Los cuatro compañeros parecían cansados, pero en buen estado de salud. De hecho, fueron vistos caminando en libertad hacia el hotel Rixos de Trípoli, donde ya están a salvo.

El español Manu Brabo, los estadounidenses Clare Gillis y James Foley, y el británico Nigel Chandler ya no están retenidos por las fuerzas del coronel Gadafi. Tras ser liberados, el portavoz del Gobierno libio, Mussa Ibrahim, ha declarado que los cuatro periodistas podrían permanecer en Trípoli para seguir informando si quisieran o ser escoltados hasta la frontera de Túnez si prefieren abandonar el país. 

"Estoy bien, estoy hecho un titán", comentó Bravo en conversación telefónica desde el hotel de Trípoli, aunque reconoció que todavía se encuentra "algo confuso y aturdido" y con "muchas ganas" de llegar a España.

La buena noticia se produce después de que un juez libio condenara al reportero español a un año de prisión no aplicable al no tener antecedentes y a una multa simbólica de cien euros por entrar sin el visado correspondiente a Libia, a través de la zona oriental controlada por los rebeldes.

"En las próximas horas, a más tardar mañana", adelantaba la ministra de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Trinidad Jiménez, que se produciría la liberación. De este modo, se pronunciaba  a mediodía para informar de los planes que el departamento pondría en marcha para traer de vuelta a casa a Brabo. 

Será el diplomático que ha seguido su caso desde Trípoli en las últimas semanas, Diego Ruíz, quien le acompañe este jueves hasta la frontera tunecina, donde le recogerá el cónsul Enrique Conde, quien viajará con él hasta España en el primer vuelo comercial disponible. Así lo ha notificado el Ministerio en una nota en la que ha añadido que el fotoperiodista español se encuentra "bien de salud" y se congratula por su liberación, al tiempo que hace llegar a sus familiares, en nombre del Ejecutivo español, su "satisfacción por este feliz desenlace".

Tras declarar que no tiene información sobre el periodista sudafricano Anton Hammerli, con quien supuestamente viajaban Brabo, Gillis y Foley cuando fueron detenidos, el portavoz del Gobierno libio ha mantenido que si se les detuvo fue porque para las fuerzas leales al régimen es difícil distinguir entre periodistas y gente que colabora con rebeldes.

"Es tiempo de guerra", ha dicho Ibrahim. "Sabemos que hay extranjeros, especialmente expertos militares europeos luchando con los rebeldes de manera que el Ejército no sabe inmediatamente que esta gente son periodistas, que son inofensivos", ha añadido para concluir que "si alguno fue maltratado, le trasladamos nuestras disculpas".

Triunfo de la diplomacia

Desde su detención el pasado cinco de abril por las fuerzas del dictador libio, el Ministerio ha seguido "muy de cerca" la situación de Manu Brabo y ha realizado "todas las gestiones que estaban a su alcance para conseguir su liberación", según ha expresado en una nota de prensa. 

El problema para agilizar la liberación del fotoperiodista español era que España, como habían hecho muchos otros países, había retirado todo su personal diplomático de la delegación en Libia. 

Así, mientras que en un primer momento solicitó la colaboración de Hungría, país que ejerce la presidencia del Consejo de la Unión Europea (UE), y la de Turquía, a través de sus embajadas en Trípoli, no fue hasta que enviara de vuelta al encargado de negocios de la embajada en la capital de Libia, Diego Ruiz, cuando comenzó a avanzar el proceso de su liberación

 Este diplomático, que fue enviado el pasado trece de abril para que se hiciera cargo de la localización, el seguimiento del fotógrafo aragonés y su liberación, ha conseguido en cinco días lo que no se había podido lograr desde hace más de un mes.

Primera noche en una "casa segura"

Tras el juicio al que se enfrentó el martes por el que fue condenado a pagar una multa por entrar ilegalmente en el país, Brabo pasó su primera noche en una "casa segura" de la ciudad de Trípoli, donde aún permanecía retenido.  

El régimen de Gadafi justificaba su detención en que habían entrado en Libia sin el visado correspondiente, a través de la zona oriental controlada por los rebeldes. Una vez cerrada la vista, la madre de Manu, la zaragozana Victoria Bravo, ha declarado este miércoles que todavía desconocen la sentencia, pero ya "se le ha puesto una multa".

 Aunque desconoce si su hijo ha sido asistido por un abogado independiente y tampoco sabe qué tribunal le ha juzgado, lo que sí ha asegurado es que "hay una persona del Gobierno de España pendiente" diariamente del reportero freelance. 

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios