Hasta el momento, la criba de la Inspección Técnica de Edificios sólo tenían la obligación de pasarla todos los inmuebles de más de 50 años que se encontraban en el Centro, Albaicín, Pajaritos y Doctores; a partir de este verano, la criba se amplía a toda Granada. De esta manera, cualquier edificio que supere el medio siglo, se encuentre donde se encuentre, deberá someterse al control municipal que certifique su buen estado arquitectónico.

La novedosa medida, que entrará en vigor el próximo mes de julio, la dio a conocer ayer la concejal de Urbanismo del Ayuntamiento, Isabel Nieto, quien adelantó que su entrada en vigor responde a un decreto -de 7 de julio de 20011- del Gobierno y no del Ayuntamiento. Ampliar la inspección a toda Granada supondrá redoblar esfuerzos dentro del área y también que los ciudadanos tengan que rascarse el bolsillo aún más en el caso de que su vivienda tenga defectos estructurales.

Según la concejal, actualmente, el área tenía contabilizados 5.322 edificios en Granada que tienen más de cincuenta años. Nieto apuntó que desde que en 2004 se pusiera en vigor la ITE se han tramitado 4.652 expedientes por lo que el 87% de los edificios ya se han controlado, quedando 670 que la edil espera cerrar en 2012.

Ahora bien, con las recientes modificaciones el número de viviendas se puede doblar lo que supondrá que la mayoría de los técnicos del servicio se dediquen a estas tareas. "Tendremos que notificar a todos los ciudadanos la obligación de examinar sus viviendas, algo que conlleva un trabajo importante de información y posterior seguimiento".

De todas maneras, la responsable del área subrayó que durante el primer año, Urbanismo se dedicará a informar a todos los ciudadanos. "Desde entonces, tienen un periodo voluntario -de un año- para pasar el examen, superado este tiempo si no se ha hecho el informe, es cuando se pasaría a vía subsidiaria, sanciones y otro tipo de medidas", completó Nieto.

Es por este motivo y por las consecuencias que puede tener esta medida por lo que la edil subrayó también que todas las subvenciones y ayudas que salgan desde el área irán destinadas a ayudar a los ciudadanos a sufragar las obras o modificaciones que tengan que hacer en sus pisos o comunidades.

"Entiendo que una época de crisis nadie se plantea reformar una vivienda, pero cuando la ley te obliga no puedes negarte, por este motivo nuestra intención es ayudar al vecino en todo aquella que le pueda venir encima".

Así, los vecinos tendrían que pagar el informe de los peritos pero en los trabajos de mejora, el Consistorio podría ofrecer algunas subvenciones.