La empresa Ítaca, encargada del servicio de aula matinal en medio centenar de colegios de la provincia, se ha propuesto evitar a toda costa la huelga indefinida del próximo lunes a la que están llamados sus 150 monitores y que podría sumir a cientos de familias en un serio desbarajuste.

Con este propósito se reunirán hoy en un encuentro con la empresa de infraestructuras y servicios educativos de la Junta de Andalucía (ISE). Su intención es llegar a un acuerdo que sea lo menos lesivo posible para sus trabajadores después de que la empresa presentara el pasado martes un preconcurso de acreedores.

Será en esta reunión de hoy donde se determine si la Delegación de Educación decide traspasar el servicio a otra empresa que se haga cargo de los 150 trabajadores que en muchos casos llevan cerca de diez años prestando servicio. El responsable de la empresa Ítaca, Juan Ramón Gutiérrez, asegura que su intención es que los trabajadores cobren todo lo que les pertenece y causarle el menor perjuicio a los padres de los niños afectados.

Después de muchos años trabajando en la empresa, Juan Ramón decidió hacerse cargo de Ítaca en septiembre de 2014. La empresa ya llevaba mucho tiempo con problemas económicos así que Juan Ramón se hizo cargo de la sociedad con la intención de "salvarla por todos los medios". "En septiembre conseguimos pagar las nóminas... y en octubre y en noviembre, pero había impagos anteriores desde el mes de abril", reconoce el responsable de la empresa.

Fruto de esos impagos, Juan Ramón Gutiérrez asegura que la Junta de Andalucía le bloqueó la facturación, "en torno a unos 80.000 euros", y a partir de ahí la empresa ya no pudo levantar cabeza. "Con los pagos embargados fue imposible negociar facturas y el problema se empezó a agravar".

Por su parte una representación de miembros de la junta directiva de la asociación de padres y madres del colegio Sierra Elvira se desplazaron ayer hasta el ISE en busca de información y de posibles soluciones al problema.

"Se nos ha comunicado que mañana [por hoy] habrá una reunión con Ítaca y que de la actitud de la empresa depende el tiempo que tardará en solucionarse el conflicto, pudiendo ser desde días hasta meses", apuntaron los representantes de los padres, quienes piden urgencia en la toma de decisiones para que los perjuicios que esta huelga indefinida tendrá en las familias sean lo menos traumáticos posible.