Sin la repercusión mediática de otro tipo de bandas armadas, pero el anarcoterrorismo todavía constituye una amenaza real que ayer sufrió un duro varapalo en España después de que la Policía desarticulara uno de estos grupúsculos al detener a quince supuestos miembros de los Grupos Anarquistas Coordinados (GAC). Una operación que se ha desarrollado a través de registros en Madrid, Barcelona, Zaragoza, Palencia y Granada. Según los investigadores, algunos de los arrestados prepararon atentados como los de la Catedral de la Almudena (Madrid) o la Basílica del Pilar (Zaragoza).

Aunque en Granada no hay ningún detenido según las fuentes del Ministerio de Interior, sí que ha sido una de las capitales implicadas en la llamada operación Piñata, como es el caso del centro social La Redonda y otros inmuebles de la capital, lo que por la tarde desató movilizaciones de estos grupos de apoyo granadinos. Así, de las 15 detenciones, diez han sido en Madrid, dos en Palencia y tres en Barcelona.

Dicha operación sorprendió al secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, de visita oficial en Granada, quien confirmó que era una de las ciudades implicadas en los registros y señaló que "hay que mostrarse prudentes", ya que la investigación sigue abierta. Martínez felicitó a los agentes por su "éxito" al realizar un trabajo vital para que "el anarco-insurrecionalismo se expanda". Asimismo, destacó la importancia de "hacer frente a todo tipo de violencia que pretenda sembrar el terror e imponer de forma totalitaria sus ideas", por lo que pidió cautela para el curso de una operación que dirige el juez número 6 de la Audiencia Nacional, Eloy Velasco.

Algunos de los anarquistas, según indicaron fuentes de la investigación, pudieron preparar el atentado el 7 de febrero de 2013 en la Catedral madrileña de La Almudena. También participaron en la colocación de otro artefacto en octubre de ese año en la Basílica del Pilar de Zaragoza. Entre las acciones que se les atribuyen a algunos de los detenidos figuran un intento de acción para desestabilizar los actos de la coronación del rey Felipe VI el pasado junio, así como cuatro ataques a sucursales bancarias.

Las mismas fuentes destacaron que en la operación han caído los principales líderes de los GAC, tanto de su aparato político y de captación como de financiación, de propaganda y de acción directa. Además de esas detenciones, catorce personas fueron arrestadas durante los registros por resistencia a la autoridad. El 7 de febrero de 2013, el denominado Comando Insurreccional Mateo Morral asumió la colocación en la Catedral de la Almudena de un artefacto en una bolsa que no llegó a explotar. Meses después, el 2 de octubre, una bombona de camping gas junto al órgano de la Basílica del Pilar de Zaragoza causó daños materiales. Y 40 días después, la Policía detuvo a cinco personas, entre ellos los dos presuntos autores materiales: un hombre y una mujer.

En los registros, los agentes se han incautado elementos para la fabricación de artefactos incendiarios, bombonas de camping gas, pequeñas cantidades de droga, balanzas de precisión y dinero en efectivo.