El equipo de gobierno de la Diputación mostró ayer su "preocupación" por la creciente desaparición de servicios financieros en el ámbito rural ante el progresivo cierre de oficinas bancarias. El presidente de la institución provincial, José Entrena, lanzó este mensaje acompañado de los portavoces del resto de grupos políticos que permiten el gobierno socialista, mientras que el PP decidió autoexcluirse de la declaración conjunta por considerar que "llega tarde". En concreto, Entrena hizo un llamamiento a las entidades bancarias que operan en Granada para que "dentro de su política de responsabilidad social corporativa" garanticen la cobertura financiera en los 35 municipios de la provincia sin servicios de este tipo, a los que hay que sumar otros cuatro pueblos que solamente cuentan con un cajero de BMN.

"La Diputación tiene el deber legal de prestar asistencia a los pequeños y medianos municipios y la obligación de velar para que esos municipios cuenten con servicios básicos como los servicios financieros", detalló Entrena. En este sentido, aseguró además que la población de los municipios sin bancos, "la mayoría situados en la zona más alejadas y deprimidas, están en situación de exclusión financiera", al tratarse en muchos casos de una población envejecida para la que la banca electrónica tampoco es la solución debido a los inconvenientes tecnológicos y las dificultades que genera este método entre los mayores.

De esta manera, el dirigente socialista invitó a las entidades financieras que se sumen a la celebración de una comisión mixta formada por responsables bancarios y técnicos de la institución con el objetivo de analizar las posibilidades económicas de la provincia. En este sentido, Entrena reconoció que, aunque el grueso de las oficinas cerradas en la provincia (94 desde finales de 2013) son de BMN, la petición se extiende a todas las firmas bancarias.

Por su parte, el grupo del PP en la Diputación, que no asistió a la comparecencia conjunta, criticó a Entrena por "llegar tarde" en la defensa del mantenimiento de las sucursales bancarias en la provincia y le acusó de "cobardía" y de estar "sujeto a las órdenes de su partido y de sus socios de gobierno" por no pegar un "tirón de orejas" a su compañero socialista Antonio Jara, presidente de CajaGranada Fundación y consejero de BMN, por el cierre continuado de oficinas de esta entidad.

Además, el portavoz del PP en la Diputación, José Robles, tachó de "actitud hipócrita" que Entrena se refiera a un supuesto desmantelamiento "global" de entidades bancarias en la provincia, cuando es "únicamente" BMN la que está cerrando oficinas.