"El Milenio no es una carta a los Reyes Magos, es lo que podamos hacer entre todos. Y nadie está excluido, a nadie que quiera participar se le impedirá hacerlo".

Así contestó el consejero de Presidencia de la Junta, Antonio Ávila, a la petición del PP de que las cabeceras de comarca de Granada -Loja, Guadix, Baza y Motril- sean "incluidas" en el Consorcio. Esa solicitud fue rechazada en el Parlamento de Andalucía, lo que provocó la indignación de los populares. La de la Junta es, en su opinión, una postura de "indiferencia total" hacia ciudades representativas.

Ávila, tras recordar que cuando se empezó a hablar del Milenio "hubo algunos que dijeron que era un invento" -en clara alusión a las muchas críticas aireadas desde el PP-, y que esos mismos son los que quieren participar "ahora que hay un presupuesto, unos órganos de gobierno y en breve una programación", incidió en que, de entrada, todas las poblaciones tienen la oportunidad de unirse al Consorcio por una misma vía: a través de la Diputación Provincial.

Ávila, que en una anterior visita a Granada ya parafraseó al ex presidente de Estados Unidos John Fitzgerald Kennedy, volvió a hacerlo ayer. "Va siendo hora de que algunos se pregunten no ya qué es lo que el Milenio puede hacer por ellos, sino qué pueden hacer ellos por el Milenio", enfatizó.

El consejero puso como ejemplo de reflejos al Ayuntamiento de Baza, municipio gobernado por el PSOE donde se va a ejecutar una obra vinculada al Milenio, la remodelación integral del maltrecho Palacio de los Enríquez. En ese sentido, indicó que "el Ayuntamiento ya ha actuado, ha comprado el palacio a sus propietarios y nos lo va a ceder para su rehabilitación".

Por su parte, el secretario de Estado de Cooperación Territorial, Gaspar Zarrías, hizo un llamamiento a la unidad y a la lealtad institucional. "Si utilizamos el Milenio como arma arrojadiza, mal irá la cosa", afirmó.

Tanto Carlos Rojas, alcalde de Motril, como Santiago Pérez, regidor de Guadix, destacaron el martes que no era lógico que Baza hubiera sido incluida en la programación inicial de obras y, sin embargo, se hubieran dejado fuera numerosas actuaciones en las dos ciudades citadas, ambas gobernadas por el PP. "No tiene sentido que a municipios que no han solicitado su participación se les dé dinero y a otros que sí lo hemos hecho, no se nos tenga en cuenta", subrayó Santiago Pérez.