El área de Economía del Ayuntamiento de Granada se quedó corto a la hora de presupuestar el dinero para pagar la subvención del transporte público en 2015. Así se desprende de las facturas de los cuatro primeros meses del año que demuestran que en el mes de abril el consistorio ya se había gastado el 72,28% del presupuesto previsto fijado en 10.229.859 euros. Teniendo en cuenta que todavía tienen que llegar a las facturas de mayo, junio y julio y que la tendencia de los meses anteriores es que alcancen el millón de euros una cosa queda clara: el presupuesto, a 31 de julio de 2015, con total probabilidad está agotado.

Así lo confirma el portavoz de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Granada, Francisco Puentedura. Según ha explicado el edil a Granada Hoy, el área de Economía fijó en 10.229.859,59 euros la partida para 'Transportes y aparcamientos promoción, mantenimiento y desarrollo del transporte público y otras subvenciones del transporte urbano'. Una cuantía ahora insuficiente teniendo en cuenta que se ha agotado en julio y que quedan por asumir los cinco meses siguientes agosto, septiembre, octubre, noviembre y diciembre.

El Ayuntamiento de Granada llegó a un acuerdo con Rober y fijó una tarifa plana con una cuantía fija que la empresa de transporte público cobra cada mes. Ese dinero proviene de dos vías, de la cuantía recaudada por los billetes de autobús y títulos de transporte que pagan los usuarios sumada a la parte que 'compensa' el Ayuntamiento mediante la subvención. En enero esta diferencia supuso a la capital el pago de una factura de 705.644,72. Ya en ese mes la empresa de Transportes Rober puso una reclamación al presupuesto municipal advirtiendo de que la cantidad anual prevista era insuficiente y además no contaba con la previsión de crédito necesaria para liquidar el año anterior conforme con las decisiones de gasto adoptadas durante dicho ejercicio que aumentó la tarifa plana desde los 2.453.000 euros hasta los 2.981.000 como consecuencia de la pérdida de viajeros y de la ampliación de las líneas SN-3, SN-4, SN-5 y C-3 respondiendo a las demandas vecinales. Transportes Rober no obtuvo respuesta favorable a su petición y los meses siguieron corriendo y descontando dinero hasta dejar a cero el presupuesto para transporte.

En febrero, la factura alcanzó los 811.689 euros. Ya en marzo, con la reestructuración de los kilómetros y la liquidación de los seis meses de 2014 llegó la primera sorpresa: el Ayuntamiento tuvo que pagar 1.072.467 euros por el mes y 2.710.053 por la reestructuración de los kilómetros de los seis meses de 2014 en los que operó la LAC. También este mes, el consistorio tuvo que pagar la liquidación de enero y febrero, por valor de 1.056.499 euros. Ya en abril, el precio se normaliza y solo hay que pagar la diferencia entre los ingresos por billetes y la tarifa plana con un coste de 1.038.268 euros.

Así, en total, en el cuarto mes del año, el Ayuntamiento ya se había gastado 7.394.622 euros del presupuesto total lo que supone el 72,28%. Para Puentedura, aunque las facturas de mayo, junio y julio no han llegado, la situación es crítica. A falta de que lleguen y teniendo en cuenta la tendencia de las facturas que alcanzan en general el millón de euros en los siete primeros meses del año, ya se ha agotado el 100% del dinero que el Ayuntamiento tenía presupuestado. Para Puentedura al consistorio solo le queda una opción: Realizar una operación de crédito de al menos seis millones de euros para poder pagar el transporte hasta que finalice el año. "Con la evolución de los datos la LAC se va a acercar a un sobrecoste de cerca de seis millones de euros en 2015", remarca el edil que explica que el coste del servicio se ha incrementado medio millón de euros cada mes. Para Puentedura, la situación es muy grave, sobre todo si se tiene en cuenta que este encarecimiento no ha supuesto "una mejora del servicio de transporte público ni ha mejorado la comunicación entre los barrios de la ciudad". Por todo ello, desde el grupo municipal de Izquierda Unida se exigen responsabilidades políticas pues: "Nadie asume que la llegada de la LAC ha supuesto un sobrecoste de millones de euros que se han tirado a un pozo sin fondo y solo ha servido para aumentar la deuda de la ciudad".

Con esos seis millones de euros, el portavoz de IU considera que se podrían haber hecho muchas cosas, como crear más de 500 puestos de trabajo para aliviar la situación de desempleo de miles de familias; iniciar las obras de la tercera fase de Santa Adela luchando así contra la infravivienda o impulsar políticas sociales para atender a miles de familias que, sin prestación, están sufriendo el drama de la pobreza y el paro.

Como solución, el edil plantea que el la gestión del transporte público vuelva al Ayuntamiento así como pide la dimisión de los responsables políticos que han promovido este sistema de transporte.

Desde su puesta en funcionamiento, el nuevo sistema de movilidad ha estado envuelto en polémica. Aunque los granadinos parecen haberse adaptado o consolado con el nuevo sistema de transporte protagonizado por la Línea de Alta Capacidad (LAC), los transbordos siguen siendo un quebradero de cabeza para los vecinos. Así, durante toda la campaña electoral y después el tema del transporte ha sido el verdadero arma arrojadiza entre el equipo de gobierno y la oposición.

Ahora, todas las expectativas están puestas sobre el futuro Observatorio de la Movilidad, que forma parte del pacto de 50 puntos firmado por el equipo de Gobierno del PP, y Ciudadanos. Será este organismo formado por todos los agentes de la ciudad el encargado de mejorar la movilidad en la capital y buscar lo que más falta le hace a Granada, consenso.