Alfonso Lázaro de la Torre, el titiritero granadino que ha estado cinco días en prisión acusado de ensalzar a ETA y Al Qaeda en un espectáculo infantil programado por el Ayuntamiento de Madrid en carnavales, ya advertía hace unas semanas en una entrevista que la obra de la polémica no es "muy políticamente correcta" ni está pensada para niños.

En una entrevista emitida hace unos días por el canal Granada CF Televisión, el titiritero granadino admitía que las producciones de su compañía no son obras "para que la vean los niños", pero señalaba que no se habían "planteado mucho eso" y que no les creaba problema que fueran a verla público infantil.

"Siempre han venido niños y niñas a ver las obras (...), ha habido padres y madres que las han visto más apropiadas y otros que no, pero bueno, también cada familia marca sus límites diferentes", explicaba Lázaro en la entrevista, que fue realizada el pasado 26 de enero, tres días antes de que la obra por la que han ingresado en prisión, denominada La bruja y don Cristóbal, se estrenara en Granada en la biblioteca social Libre Albedrío. También se representó la obra en el centro social ocupado La Redonda.

Lázaro aseguró que los títeres, igual que otras artes como el teatro, la danza o el cine, tiene obras infantiles, familiares y de adultos. "Nuestras dos últimas creaciones no están pensadas para un público infantil porque no son muy políticamente correctas para que las vean niños", explicaba, definiendo que La bruja y don Cristóbal no era una obra infantil.

Fue el sábado, a instancias de la Fiscalía, cuando el juez Ismael Moreno ordenó prisión provisional sin fianza para Lázaro, de 29 años, y Raúl García Pérez, de 34, por un supuesto delito de enaltecimiento del terrorismo y otro cometido con ocasión del ejercicio de derechos fundamentales y de las libertades públicas.