Los alumnos del IES Alonso Cano de Dúrcal participan en un curioso concurso. Aquellos que mantienen el aula más limpia son recompensados. El motivo de esta particular competición es paliar la falta de efectivos de la plantilla de limpiadoras, reducida de tres a dos mujeres. Ayer, una representación de padres de alumnos de este centro y del IES Emilio Muñoz, de Cogollos Vega, presentaron ante la Delegación de Educación de la Junta en Granada unas 700 firmas para instar a la Administración a que cubra las bajas.

Según FAMPA Alhambra, la situación que viven estos dos centros no es excepcional. Según sus datos, hasta doce institutos granadinos tienen bajo mínimos sus plantillas de limpieza. Se trata de los centros educativos Luis Bueno Crespo, Alhambra, Virgen de las Nieves, La Zafra de Motril, La Caridad de Loja, Zaidín Vergeles, Aynadamar, Padre Suárez, Cartuja y Alba Longa de Armilla.

Según los padres, algunos de estos centros arrastran los problemas generados por la falta de limpiadoras desde el curso pasado, y en otras el problema llegó al inicio de este año académico.

A lo largo de estos meses la situación en algunos de estos institutos ha sido más que precaria. Así, los padres del Emilio Muñoz de Cogollos Vega reseñan que antes de las fiestas navideñas la baja de una de las dos limpiadoras dejó al centro con sólo una trabajadora durante una semana. El centro cuenta con un total de 7.500 metros cuadrados, por los que diariamente transitan más de medio millar de personas entre alumnos y profesorado. Se da el caso, además, de que el centro cuenta con aulas y talleres de ciclos formativos de la familia agraria, lo que supone que los estudiantes tienen parte de las horas lectivas en una finca agraria, en invernaderos y talleres, una circunstancia que hace que "por más cuidado que se tenga, provoca un incremento de suciedad". Los padres de este instituto consideran que sus hijos "no están recibiendo la atención que merece el alumnado de un centro público".

Por su parte, los padres del IES Alonso Cano subrayan que el centro se amplió sin que ese aumento de metros cuadrados supusiera un aumento en el número de la plantilla de limpieza, que desde la creación del instituto ha estado formada por tres mujeres. En septiembre de 2015 una de las limpiadoras dejó su plaza en Dúrcal, y su vacante no se ha cubierto. "Contamos con dos limpiadoras, muy por debajo de las necesidades reales del centro". Los padres alegan que es "imposible mantener las condiciones higiénicas mínimas del centro con esta plantilla". El centro cuenta con una superficie de 4.693 metros cuadrados, y en el mismo estudian 640 alumnos. "En nuestra opinión, las condiciones higiénicas del instituto se encuentran resentidas cada vez más", pese "al esfuerzo realizado de manera voluntaria por el alumnado para colaborar en las tareas de limpieza". Los padres concluyen que "no valen más excusas".