Quedan dos días para el esperado 17-S, una cita que medirá el grado de adhesión de la sociedad granadina a la lucha por la reconexión ferroviaria. Granada ha sido tachada en muchas ocasiones de ciudad conformista, en la que las expresiones de carácter civil relacionadas con reivindicaciones autóctonas no han tenido un gran impacto. De esta forma, la gran marcha por el aislamiento ferroviario, que discurrirá entre la estación de Andaluces y la Subdelegación de Gobierno el próximo sábado, servirá para calibrar el poder de convocatoria en un tema sensible a nivel político, pero que más allá de los barrios afectados (La Chana y Rosaleda) no se sabe aún si tiene mucha repercusión entre el resto de la ciudadanía. El propio alcalde Paco Cuenca quiso ayer hacer un llamamiento a la asistencia para desmitificar la leyenda de ciudad dormida: "Nos quejamos muchas veces de la situación que tenemos. Esta vez tenemos la oportunidad de mostrar que ya está bien de que se esté desplazando y ninguneando a Granada".

El alcalde, como es lógico, será uno de los asistentes a la movilización que partira a las doce de la mañana del sábado desde la estación de Renfe, donde las obras van a paso lento. Además del regidor se espera la presencia de gran parte de la plana mayor del PSOE en la provincia, con representación de la Diputación Provincial, de la Junta y de algunos parlamentarios andaluces y diputados nacionales.

En parte, los socialistas afrontan la 'batalla' del 17-S como una manera de reivindicarse frente al Gobierno central del PP, cuyo departamento de Fomento ha sido el que más suspicacias ha levantado por la gestión del AVE. Pero el PSOE no va a ser el único partido representado, ya que en la marcha habrá repartidos políticos de Podemos, IU y C's, que ya han mostrado su respaldo a la causa del fin del aislamiento ferroviario, y que además forman parte activa de la Mesa del Ferrocarril.

No habrá por el contrario representante alguno del PP, puesto que consideran que la protesta tiene un tinte político que difícilmente se puede desligar del asunto en cuestión. Sin ir más lejos el propio presidente provincial de los populares, Sebastián Pérez, en su comparecencia con motivo del inicio del curso político hace unos días, censuró la aparición de varias plataformas ciudadanas con base política.

En el lado opuesto, Cuenca invitó "a todos los granadinos a que levanten la voz" en la marcha del sábado después de que Fomento "lleva meses diciendo que va a dar una respuesta y una solución y pasa un mes y pasa otro mas y van más de 500 días y no tenemos conexiones ferroviarias". El alcalde apuntó que Granada "no puede seguir así porque nos estamos jugando nuestro presente y nuestro futuro. Ha llegado el momento de manifestarse, echarse a la calle y decirle al Ministerio que queremos las mismas infraestructuras que tienen otras ciudades".

Precisamente ayer también se reunió la Mesa del Ferrocarril en el Ayuntamiento de Granada para manifestar su unanimidad a la manifestación del sábado bajo la premisa de que "Granada despierte de una vez de forma unánimen ante el aislamiento y la falta de respeto de Fomento". Asimismo, el encuentro sirvió para unificar criterios en torno a tres aspectos: pedir información a Fomento de la situación del AVE en Loja, reivindicar la reconexión por Moreda y solicitar un nuevo compromiso por escrito de la variante lojeña y el soterramiento. Aspectos todos ellos que se trasladarán mañana a las mesas del ferrocarril de Almería y Jaén en la mesa que se celebra en Guadix por la marginación ferroviaria a Andalucía oriental. Por último, se puso en conocimiento la desaprobación de Fomento de prestar un tren chárter para trasladar la mesa a Madrid "por falta de disponibilidad" y se propuso viajar todos los representantes a la capital de España en autobús como el próximo acto reivindicativo que recogerá la ola del 17-S.