Granada

Los estudios para la ampliación por Atarfe se desarrollarán en paralelo

  • La Junta ha destinado un millón de su presupuesto 2010 para el estudio de nuevos tramos

La construcción del Metro de Granada no se parará en 2012, fecha en que está prevista la terminación de la línea 1, la que se está ejecutando entre Albolote y Armilla, pasando por Maracena y Granada. Para permitir que a partir de ese año continúen las obras de ampliación es necesario que se realicen los estudios y proyectos ahora, durante la ejecución de la primera línea.

La Junta de Andalucía ha destinado en sus presupuestos para 2010 un total de 102 millones de euros para el Metro de Granada. De todo ese dinero destinado mayoritariamente a la ejecución de todos los tramos que están en construcción actualmente, un millón de euros está previsto para la redacción de los estudios de ampliación de esta primera línea de Metro.

Las opciones para ampliar la línea 1 eran varias, pues se ha planteado la necesidad de reforzar la zona sur y la llegada al Aeropuerto, como ocurre en muchas de las ciudades que disponen de Metro.

Pero al final la opción escogida para continuar la extensión del Metro es Atarfe, una opción que no tiene tanta complejidad como otras y que no requiere de muchos kilómetros de nueva vía.

No obstante, lo que se tiene previsto hacer durante el año que viene no es más que el estudio previo, que delimitará todos los detalles y necesidades de esta futura obra de ampliación.

El delegado de la Junta en Granada, Jesús Huertas, manifestó ayer, durante el acto organizado para asistir al final de la ejecución del túnel bajo la carretera A-44, que la previsión del millón de euros para seguir planteando mejoras en este proyecto evidencia que esta infraestructura es una "prioridad" para la Administración Autonómica en Granada.

El delegado manifestó que el Metropolitano será un medio de transporte que puede cambiar de forma radical la vida y el tráfico de la ciudad y su área de influencia.

Además de la construcción del Metro como medio de transporte, esta infraestructura implica también una reurbanización, de fachada a fachada, de todos aquellos lugares por donde transcurren las vías. Estas obras suponen, por tanto, una revalorización de todos los entornos por donde transcurre el Metro. También permitirá el nuevo sistema de transporte potenciar los espacios peatonales y las zonas verdes.

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