En cualquier momento podía llegar la derrota del Baza y la rotura de la imbatibilidad de Manolo, pero no por posible ha sentado bien a la afición bastetana. Y es que parecía, y sobre todo después de ver el potencial del Ronda, que en la serranía malagueña no iba a ser. El equipo de Rafa Muñoz recordó aquellos partidos de la primera vuelta en los que era presa de sus rivales cuando actuaba de visitante.

Pero como agua pasada no mueve molinos, es el justo momento de olvidar y corregir. Por si fuera poco, este domingo llega al Constantino Navarro el Motril, que desde inicio de temporada se encaramó en la primera posición y que, aunque en las últimas jornadas parece que ha aflojado algo el pistón, sigue sin caer derrotado y firme en sus propósitos de ser campeón del grupo IX.

Se prevé un gran partido. Seguro que los de la Costa Tropical llegarán dispuestos a consolidar su liderato, pero también es seguro que los bastetanos no van a consentir perder su vitola de equipo imbatido como local. Sin duda un partido, que ha sido declarado por la directiva del Baza como día del club, que va a tener muchos aspectos diferentes, empezando por el reencuentro de varios jugadores que militan en las filas motrileñas y que recientemente han vestido la rojiblanca bastetana, y algunos como Bacas y Juanlu que contribuyeron al mayor éxito de la historia del Baza, el ascenso, y que pudieron saborear de la miel del éxito.

Es un estupendo momento para que, otra vez, las gradas del Estadio de la Carretera de Caniles se vuelvan a ver repletas. Eso ayudaría a que se pueda hacer frente lo antes posible a los pagos pendientes de jugadores y cuerpo técnico, que ya comienzan a necesitar su sueldo.