Donde empezó todo para acercar al baloncesto de Granada a donde se merece la ciudad. Allí, en Albacete, el Covirán Granada disputa esta tarde uno de esos partidos que aunque apenas se lleven menos de dos meses de competición puede marcar el futuro próximo de la entidad rojinegra. A nadie escapa que el equipo de Pablo Pin tiene como objetivo el ascenso a LEB Oro pero a la segunda categoría del básquet nacional hay dos formas de acceder: por la vía rápida o mediante un costoso play off. Con la primera se sube directo, pero para ello hay que quedarse primero en la tabla clasificatoria al final de liga regular. Y es ahí donde el choque de esta tarde cobra especial importancia.

El motivo no es otro que el duelo que los nazaríes disputan esta tarde en el Pabellón del Parque ante el líder de la categoría, el Arcos Albacete Basket, la sorpresa de la LEB Plata a día de hoy que cuenta con dos victorias más que los de Pin. En tierras manchegas logró el Covirán el ascenso y en ese mismo pabellón necesita ganar para no alejarse de la primera plaza en tres triunfos en caso de perder con la disputa de tan sólo nueve jornadas.

Los rojinegros tiene la baja de David Iriarte, que ha sufrido una lesión en un abductor

Una cita hecha para que los jugadores rojinegros demuestren ese supuesto favoritismo que los entrenadores de los distintos equipos indican en sus declaraciones. Pero para ello, habrá que mejorar varios aspectos. Uno de ellos y fundamental, es cortar la sangría de balones perdidos. Con una media de más de 16 pérdidas en los últimos cinco partidos, se hace muy difícil ganar dando tantas facilidades. Y menos mal que en el tema reboteador el Covirán destaca, pero por ejemplo el pasado sábado ante el Real Murcia no le sirvió capturar 14 rechaces más que su rival.

Para ganar en Albacete, varias son las claves. Una de ellas es la aportación de hombres llamados a ser importantes como Eloy Almazán, maniatado hace siete días por la defensa de Jasen o los irregulares Devin Wright y Manu Rodríguez. Cuando esta tripleta ha funcionado, el Covirán no ha tenido problemas para vencer. Con Corts recuperado de su esguince de tobillo, Pin vuelve a tener una baja. Se trata de David Iriarte, que ha sufrido una rotura en el abductor de la pierna derecha por lo que no podrá contar con toda la plantilla disponible para medirse a un rival que únicamente ha perdido un partido y que acumula cuatro victorias de manera consecutiva.

Varias son las preocupaciones del cuerpo técnico rojinegro y la primera se llama Garret Covington. El escolta procedente de Western Illinois University es el máximo anotador de la categoría con una media de más de 21 puntos por partido, siendo una amenaza constante en el exterior. Además, el veterano ala-pívot Georvys Elías está cuajando una gran temporada, lo que unido a la buena dirección de Javi Marín y los buenos porcentajes desde más allá de 6,75 de Uge Gómez y Tyler Livingston, han hecho que los albaceteños sean un conjunto muy difícil de batir. Aunque aún se esté en noviembre, el choque de hoy es la primera final de la temporada.