Emasagra ha intensificado, como cada año y en la antesala del otoño, la limpieza de, aproximadamente, 20.000 imbornales que hay en la ciudad y en los municipios del Área Metropolitana donde presta servicios, Alhendín, Armilla, Cájar, Cenes de la Vega, Cúllar Vega, Churriana de la Vega, Gójar, Huétor Vega, La Zubia, Las Gabias, Ogíjares, Otura, Pinos Genil y Pulianas.

Los imbornales, elementos que recogen el agua de lluvia y la introducen en la red de alcantarillado, suelen taponarse y disminuyen así su capacidad de drenaje, por lo que la Empresa Municipal de Abastecimiento y Saneamiento de Granada intensifica su limpieza antes de la llegada de la temporada de lluvias y del año hidrológico, que arrancará el próximo 1 de octubre.

La empresa ha elaborado un calendario preventivo para actuar por todos y cada uno de los barrios y municipios, acentuándose en algunas zonas conflictivas donde hay problemas cuando arrecian las lluvias y se actúa en más de una ocasión, como pasos inferiores o puntos bajos.

La limpieza de imbornales y de la red de alcantarillado es una medida prioritaria para la empresa durante todo el año, que se intensifica en este periodo previo a las lluvias. Para ello, Emasagra destina en horario de mañana y tarde tres equipos de operarios, supervisados por personal técnico, que disponen de vehículos adaptados para limpiar tanto las rejillas como los ramales de los imbornales.

Hace apenas unas semanas y según las explicaciones del equipo de gobierno, el mal estado de limpieza de los imbornales del recientemente reformado Paseo del Salón causó inundaciones en una de las vías laterales. Como se recordará, uno de los objetivos prioritarios de la obra que el Ayuntamiento realizó en estos jardines -que cuentan con la catalogación de BIC- fue mejorar las canalizaciones para evitar las frecuentes inundaciones.