El cerro de San Miguel ha amanecido este jueves  rodeado por más de cien agentes de Policía y varias excavadoras para iniciar el desalojo de las casas cueva después de siete años de intentos. En torno a las 06:00 los agentes se han personado en el lugar y han comenzado el desalojo de seis de las ocho cuevas que están amenazadas por derrumbe. Las primeras informaciones hablan de dos personas detenidas tras varios enfrentamientos entre los agentes y vecinos.

El pasado mes de diciembre el Ayuntamiento se propuso desocupar de una vez por todas a los moradores de las ocho cuevas declaradas en ruina, pero la oposición de los habitantes de las cuevas obligó al Ayuntamiento a recurrir a una demanda judicial. Según anunciaba la concejal de Urbanismo, Isabel Nieto, hace un par de semanas comenzaron a llegar las primeras autorizaciones judiciales para meter las máquinas en el cerro y comenzar a tapiar las cuevas. El Ayuntamiento siempre ha mantenido que las cuevas no tienen ningún valor histórico y de hecho corroboraron que se excavaron hace menos de cien años por la mano del hombre.