La ruptura de las negociaciones del convenio de hostelería han provocado que los trabajadores amenacen con una huelga durante una de las fechas más señaladas para el sector: Semana Santa. Según expusieron ayer los sindicatos, este desencuentro es "una falta de respeto por parte de la patronal.

Para conocer la última vez que se llegó a un acuerdo en el sector de hostelería hay que remontarse al año 2013. Los desencuentros desde entonces entre empresarios y sindicatos han ocasionado que el convenio haya cumplido hasta cuatro prórrogas, debido a la cláusula de 'ultra actividad' que se firmó hace ahora cinco años. Este apartado estipulaba que, ante la falta de consenso, se prorrogaba el último convenio firmado. Sin embargo, este tema llegó a los tribunales en el año 2016, ante un intento de la patronal de anular ese tratado. Finalmente el juez falló a favor de los trabajadores, lo que mantuvo la prórroga del convenio que continúa hasta ahora.

Los trabajadores votarán el jueves si finalmente convocan o no este parón laboral

La prórroga se traduce en que desde hace cinco años no exista subida salarial alguna en el sector, mientras que a su vez se produce una externalización de los servicios. Este ha sido uno de los aspectos más denunciado por los sindicatos ya que, según exponen, se han realizado subcontratas para desempeñar las labores del sector. De esta manera se habría evitado que a esos trabajadores subcontratados se les aplique el convenio colectivo de hostelería, lo cual se traduce en un ahorro económico para los empresarios, sueldos más bajos para estos trabajadores y un descenso del personal contratado directamente por las empresas.

Ante ello, se han producido varias manifestaciones en el sector para reclamar a la patronal que se llegase a un acuerdo que mejore las actuales condiciones laborales, una negociación que a comienzos de este año parecía haber avanzado.

Tras haberse designado el pasado verano a un mediador nombrado por el Consejo Andaluz de Relaciones Laborales (CARL) -intermediario que contó con el visto bueno tanto de los sindicatos CCOO y UGT, como de la Federación de Hostelería, y que desde hace cuatro meses interviene en la negociación-, el pasado mes de enero ambas partes consiguieron acercar posturas. Sin embargo, la pasada semana se dio un paso atrás en la negociación.

El jueves, el equipo de mediación del CARL y los sindicatos mantuvieron una reunión para llegar a "una propuesta global" que un día más tarde fue presentada a la patronal. Pese a que según defienden los sindicatos, la proposición había sido consensuada, fue rechazada por los empresarios del sector, provocando así una "ruptura de las negociaciones".

Este desencuentro ha provocado que desde los sindicatos anuncien una posible huelga del sector de cara a Semana Santa, aspecto que se votará en una asamblea fijada para pasado mañana.

Tal y como explicó el responsable de Hostelería de UGT Granada, Miguel Ángel Prieto, se trata de "una nueva falta de respeto" por parte de la patronal, "no solo para los sindicatos, sino para los 15.000 trabajadores del sector". Prieto consideró que la patronal "lleva engañando a los trabajadores del sector desde 2013, y también a la Junta de Andalucía desde los últimos cuatro meses".

Asimismo, el sindicalista de UGT indicó que "se van a tomar las acciones necesarias para que esta patronal acepte sentarse a negociar en serio, y acepten que los trabajadores del sector merecen un convenio digno por el que se actualicen las condiciones sociolaborales y permita mejorar la profesionalidad del sector, además de erradicar la competencia desleal entre las empresas".

En esta misma línea se pronunció su homólogo en CCOO Granada, Alejandro García, que además criticó que la patronal "se haya encargado de romper la negociación tras cuatro meses de esfuerzos". Así, García insistió en que los sindicatos no han roto las negociaciones, "sino que el no fue de la patronal", además de advertir del "deterioro que se va produciendo en la actividad turística" a consecuencia de ello.