El juez de la Audiencia Nacional José de la Mata decretó ayer prisión incondicional sin fianza al expresidente del Granada Club de Fútbol, Quique Pina, después que le tomara declaración durante cerca de tres horas. El magistrado tomó la decisión ante la posibilidad de que destruya pruebas que le incriminen en los presuntos delitos cometidos de blanqueo de capitales derivado del traspaso de jugadores. El dirigente fue trasladado tras su declaración a la prisión de Soto del Real (Madrid).

Pina fue detenido el pasado miércoles en la ciudad murciana de Molina del Segura en el marco de una operación contra el blanqueo de capitales llevada a cabo por la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal de la Policía Nacional (UDEF). Ayer por la mañana pasó a disposición del titular del juzgado central de instrucción número 5 de la Audiencia Nacional, José de la Mata, que, tras tomarle declaración, decretó para él prisión incondicional y sin fianza, según informaron fuentes de este tribunal.

De la Mata, que tras dictar el auto de prisión levantó el secreto de la causa, cree que Pina pudo incurrir en los delitos de blanqueo de capitales, insolvencia punible y otro contra la Hacienda Pública.

El levantamiento del secreto de la causa permitirá tanto al Granada CF, el club que rigió entre los años 2009 y 2016, como al Cádiz CF, entidad de la que es accionista y en la que ostentaba el cargo de consejero delegado, acceder al sumario y estudiar si se personan en la causa contra el exagente de futbolistas.

El magistrado fundamentó su decisión de enviarle a prisión preventiva en el riesgo de que Pina pueda destruir pruebas relacionadas con su presunta actividad delictiva, en el caso de quedar en libertad. En ella no se menciona que exista riesgo de fuga por parte del murciano.

El juez levantó el secreto de sumario del caso en el que se podrían personar Granada y Cádiz

En el marco de esta operación contra el blanqueo de capitales, la Policía practicó una serie de registros en diferentes clubes de fútbol asociados con el empresario y agente de futbolistas, como el Granada CF y el Cádiz. En ambos casos, los registros se llevaron a cabo en las sedes de ambos clubes, situadas en los estadios de Los Cármenes y Ramón de Carranza, además de en las respectivas ciudades deportivas. En el caso del Granada las pesquisas se extendieron hasta las 20:00 horas del miércoles, mientras que en la bahía gaditana los agentes de la UDEF no abandonaron las instalaciones hasta pasadas las once de la noche.

También fue registrado durante horas el chalé en Murcia del empresario deportivo, donde decenas de agentes intervinieron diversa documentación relacionada con Pina, que estuvo presente durante el registro policial, además de grandes cantidades de dinero en efectivo como reveló ayer el diario La Verdad de Murcia.

A lo largo de la jornada del pasado miércoles, la Policía también llevó a cabo otros dos registros en sendos locales en Murcia relacionados con la actividad del empresario, además de otros en Barcelona, en este caso el despacho de Jordi Trilles, abogado de Gino Pozzo y su representante dentro del consejo de administración del Granada CF en calidad de vicepresidente hasta el pasado mes de mayo.

Tras no triunfar en el césped como jugador, Pina alcanzó la fama fuera de los terrenos de juego; primero como mediador y pieza clave en la llegada de importantes futbolistas a España, como Riquelme, Anelka, Saviola o Vieri, y después al frente de clubes como el Ciudad de Murcia, el Granada y el Cádiz.

Fue propietario del Club de Fútbol Ciudad de Murcia, con el que ascendió a Segunda División. En 2007 vendió su plaza en la categoría de plata al empresario granadino Carlos Marsá para crear el Granada 74 CF, del que figuró como directivo. Fue presidente del Granada CF y en 2011 asumió la dirección deportiva del Cádiz. Además, también es accionista del Lorca Deportiva, club de Segunda B.