El dibujante canario Rayco Pulido Rodríguez ha sido galardonado con el Premio Nacional del Cómic, dotado con 20.000 euros, por su obra Lamia, en la que, según el fallo del jurado, muestra una gran capacidad de "innovación formal y estética".

El jurado, según explicó ayer el ministerio de Educación, Cultura y Deporte, ha valorado el aprovechamiento que Rayco Pulido hace "del andamiaje de una historia de género negro para relatar una parte de nuestro pasado, y por su tratamiento del papel de la mujer en dicho periodo".

El autor reconoce que su ritmo de trabajo es lento porque solo edita cada tres o cuatro años

El premiado aseguró entre risas nada más conocer el fallo: "Es una sorpresa, una alegría que piensen en ti, que les haya gustado. Yo ya me daba por medio jubilado, pero supongo que con el premio tendré que seguir por lo menos un poco más y seguir trabajando".

Lleva, dice, "un montón de años" -15- haciendo cómics y se había trazado "una idea" de lo que quería hacer y ya "más o menos casi había cubierto una parte importante", que era trabajar con otros guionistas; adaptar un texto, que hizo con Nela, y luego hacer un libro con su propio guión original.

Ya había cubierto su "meta principal" con esas publicaciones aunque, reconoce, su ritmo de trabajo es lento porque solo edita "cada tres o cuatro años" un libro.

"Ahora estoy dando clases en secundaria de Plástica, con lo cual el tiempo que tengo es poquito. Ahora mismo no tengo nada entre manos, solo cosas cortas como una colaboración en El País Semanal, aunque no dejo de pensar en posibles historias", admitía.

La valoración que ha hecho el jurado de la obra premiada, Lamia, no la había escuchado todavía pero cree que se ajusta bastante a lo quería contar: "Una historia académica entre comillas, pero desde un punto de vista innovador formalmente. Quería seguir trabajando con un protagonista femenino pero que no acabar tan mal como Marianela".

Pulido (Gran Canaria, 1978) es licenciado en Bellas Artes por la Universidad de Barcelona y alterna la docencia con su trabajo como dibujante de cómics. En 2004, tras participar en diversos concursos y exposiciones, comenzó a publicar historietas largas y es autor, entre otros, de Final feliz (2004), con guion de Hernán Migoya, y de Sordo (2008), con guion de David Muñoz.

Posteriormente ha publicado títulos de los que es autor de los dibujos y los textos, entre ellos Sin título, 2008-2011 (2011), Nela (2013) o Lamia (2016), un cómic de género negro que realizó durante su estancia en la Maison des Auteurs de Angoulême (Francia) gracias a una beca de AC/E (Acción Cultural Española).

El jurado ha estado presidido por el director general de Industrias Culturales y del Libro, Óscar Sáenz de Santa María, y han formado parte de él Javier Pascual, Pablo Auladell, José Javier Olivares, Juan Royo, Kike Infame, Inmaculada Vinagre, Elizabeth Casillas, María del Mar Rodríguez, Ignacio Moreno y Álvaro Máximo Pons.