CIasicismo, elegancia, luto, sobriedad. El Viernes Santo, día oficial en la celebración de la Semana Santa, fue una jornada redonda, como este año viene siendo la tónica después de que los tres primeros días el peligro del tiempo enturbiara un poco el sentimiento cofrade. Pero todo salió a la perfección y se pudieron ver en la calle a las cinco cofradías del día, cada una con su sello, con sus diferencias, pero todas con el sentimiento de sobriedad por ser Viernes Santo.

El día comenzó con el acto de las tres de la tarde en el Campo del Príncipe y el rezo multitudinario que cada año se repite ante el Cristo de los Favores de piedra y que es un episodio único de Granada y sin duda fundamental en nuestra Semana Santa. El arzobispo de Granada centró sus palabras en pedir apoyo para los refugiados sirios por la situación que viven y en la situación de miedo que se vive en todo el mundo por el terrorismo.

Por la tarde salieron Ferroviarios, Favores, Escolapios, Sepulcro y Soledad de San Jerónimo.