La Alhambra protege a sus habitantes nocturnos. Las investigaciones realizadas por el Patronato del monumento confirman la presencia de 161 especies de fauna vertebrada, si bien la asociada a ambientes húmedos se limita a tres especies de peces y seis de anfibios. A estos últimos está dedicado un ambicioso proyecto con un presupuesto de licitación de más de 67.000 euros para asegurar la presencia de los sapos y las ranas que habitan en los estanques de la colina roja. De los anfibios alhambreños solo el sapo y la rana común han completado el ciclo vital. Del resto se espera garantizar su viabilidad completa próximamente, caso del sapo corredor, el gallipato, el sapo partero bético y el sapillo pintojo meridional.

Según Catuxa Novo, responsable del Servicio de Jardines, Bosques y Huertas de la Alhambra, "el proyecto está centrado en la fauna de las albercas que reproducen el hábitat de la naturaleza, tanto en especies de flora como de fauna, porque cuando consiguen estar en equilibrio se consigue una transparencia y calidad de las aguas muy buena", apunta Novo sobre una estampa que, estos días, adquiere una belleza especial con el apogeo de los nenúfares.

Los trabajos, que comenzaron en 2008, buscan que la aplicación de plaguicidas y agentes de lucha biológica sean compatibles con las poblaciones de anfibios y otros vertebrados del suelo presentes en el monumento. También se han potenciado los anfibios como agentes que actúan contra las plagas hacia la vegetación, contribuyendo a la lucha biológica.

El agua que los visitantes pueden disfrutar en su visita al Patronato de la Alhambra y Generalife proviene del río Darro y es tomada en la Presa Real. La conducción de agua hacia la Alhambra se construyó a mediados del siglo pasado, aunque desde esta conducción se deriva agua al tramo final de la acequia del Tercio y a un tramo intermedio de la acequia Real. Tras la ejecución del canal se construyó un túnel depósito en el barranco de las Cañas hacia la Alhambra para regular el flujo. El agua se distribuye en la caseta de maniobras y alimenta a los tres albercones (albercón Nazarí, albercón de Torres Balbás y albercón de Prieto Moreno), a quince elementos hidráulicos de interés para las especies acuículas dentro del conjunto monumental (albercas, acequias o pilones), tres elementos hidráulicos en el Carmen de Bellavista y otros tres elementos hidráulicos en el Carmen de Catalanes.

El ámbito de actuación del proyecto está comprendido por las masas de aguas de la Alhambra y Generalife, por los dos tramos de acequia real que en la actualidad están restaurados y en uso y por las masas de agua de los Carmenes de Bellavista y Catalanes. Esto significa cinco zonas dentro del conjunto monumental de la Alhambra y el Generalifes: Jardines del Partal, Jardines de San Francisco, Jardines del Generalife, Tabla de los Bojes y Albercones, Carmen de los Catalanes y Carmen de Bellavista. Los trabajos incluyen varios muestreos poblacionales según la especie y sus ciclos vitales, la prospección de poblaciones cercanas al entorno monumental y un seguimiento del estado de los hábitats. Además al final cada año se publicará un informe de conclusiones sobre el estado poblacional de cada una de las especies de herpetos y otras especies acuícolas de interés presentes en el monumento.