Análisis de los Economistas del Grupo Joly

En España sobran ayuntamientos con capacidad de gasto: hay 8.217

  • En el Reino Unido hay 400 y en Alemania 300: dentro hay muchos más con sus nombres históricos, pero sólo gasta uno · Los diputaciones provinciales tienen escasa utilidad

- Grupo Joly. ¿Para cuándo una reforma del sector público?

- Francisco Ferraro. En este marco preelectoral es inimaginable, pero es una necesidad urgente. Los presupuestos de Junta, ayuntamientos y diputaciones ponen de manifiesto una limitada capacidad de inversión. En empleo público la sobredotación de Andalucía es notable: por cada millón de euros de PIB generado tenemos 3,5 empleados públicos. En España es de 2,6.

- Joaquín Aurioles. Eso es discutible, porque el PIB en Andalucía es muy bajo.

- Rafael Salgueiro. Tenemos más funcionarios públicos de lo que somos capaces de soportar.

- Joaquín Aurioles. Si dividimos el gasto público por el número de habitantes nos sale una cifra similar a la media española. El problema no es que tengamos un sector público muy grande. Es que tenemos un PIB pequeño. El problema es que el tamaño del sector privado es extraordinariamente pequeño. Y lo peor no es que sea pequeño, es que la Junta si no hay sector privado, lo quiere sustituir. Y ahí pasamos al terreno del disparate.

- Fernando Faces. Hay un sobredimensionamiento de instituciones; sobran consejerías, diputaciones. Somos la tercera autonomía, detrás de Cataluña y Madrid, en número de organismos, entes y empresas mixtas, con 369 entidades públicas. A ese gigantismo lo acompaña una descoordinación y falta de entendimiento entre todas las partes de ese conglomerado. Es habitual que las consejerías no se pongan de acuerdo en la aprobación de determinados proyectos. Eso ha producido no sólo despilfarro, sino una mala asignación de las inversiones o incentivos.

- Grupo Joly. ¿Es una rémora nuestra administración?

- Fernando Faces. La falta de eficiencia, la descoordinación, las múltiples ventanillas, la burocracia aplastante, hacen que la administración sea más un freno a la economía que una ayuda. El nuevo gobierno que venga, el principal tema que debe plantearse es este. No sólo está el problema de la dimensión, sino el del funcionamiento.

- Grupo Joly. ¿Hay que lamentar no haber aprovechado la coyuntura para tener una entidad financiera andaluza más fuerte?

- Fernando Faces. Hay una segunda vuelta que debemos pretender hacer en torno a las dos grandes cajas. El proceso de fusiones no ha acabado. No sólo es incompleto, sino que no es la solución definitiva para la financiación que va a precisar esta comunidad en los próximos años. Y hay que ayudar al sector inmobiliario. Con este sector parado durante cinco años, el resto de los motores, las exportaciones y demás, no van a compensar.

- José Ignacio Rufino. Están muy bien los planes de ajuste presupuestario y la austeridad; hay que hacer que las cosas funcionen mejor. Pero atención, dentro de la demanda agregada también está la pública. Y eso es lo que tenemos. Habrá que redimensionar, pero cuidado con entrar a cañonazos en las instituciones. Nunca he creído que la reingeniería sea una opción en gestión, su resultado ha sido desastroso tanto a nivel macro, véase el presupuesto base cero de la época Carter, como a nivel micro, con la reingeniería hecha por las multinacionales en Latinoamérica. ¿Aquí tierra calcinada y volver a crear? No creo en eso.

- Grupo Joly. En ese discurso, ¿las diputaciones entran en lo que hay que conservar?

- José Ignacio Rufino. Las diputaciones se han convertido en una caridad de la nomenclatura. Hay 300 personas, todos los asesores de la Diputación de Sevilla, de vacaciones forzosas hasta que no se termine el cuadrante de gente que va a aterrizar en la diputación, donde tienen cuatro años garantizados.

- Gumersindo Ruiz. El sector público no se puede desmantelar. Los gobernantes tienen que dar confianza en el Estado, en su papel de ordenar la vida de la sociedad. En segundo lugar, hay que atender a todas las víctimas de la crisis. Y tercero, las políticas son complejas, hay que tocar todo un poco. Por ejemplo, las cámaras de comercio ocupan un papel fundamental en la exportación; hay que darles una solución. En resumen, la solución es un tema de la sociedad civil, de los empresarios, de los sindicatos, de los gobiernos a todos los niveles.

- Rogelio Velasco. Es fundamental que este país haga una reflexión sobre el funcionamiento del Estado. Dieciocho parlamentos no pueden seguir regulando, de manera independiente, la actividad de ciudadanos y de empresas. Las diputaciones provinciales sirven para poco. Y sobran ayuntamientos. Tenemos 8.217 municipios, que están gastando en España. Una cosa descabellada. En el Reino Unido existen 400 ayuntamientos o entes con capacidad de gasto. Dentro hay municipios con su nombre histórico, que no quieren perder, pero sólo uno gasta. En Alemania son 300 con capacidad de gasto. Aquí tenemos 8.217. Eso es un despilfarro, porque la mayoría no tiene escala para prestar servicio de agua, recoger basura, ni tener una biblioteca.

- Joaquín Aurioles. La Junta no puede sacarnos de la crisis, porque no tiene competencias, no puede hacer políticas macroeconómicas, de manejo de la demanda y de influir en el corto plazo. Puede no meter la pata. Y creo que la está metiendo, porque el principal recorte de gasto lo ha hecho en inversión. Pero no ha reducido las transferencias que sostienen el tremendo entramado institucional que se ha desarrollado en torno a ella. Ahí es donde hay que trabajar en materia de austeridad, para prepararnos para que cuando lo que sea nos saque de la crisis nos coja lo mejor preparados posible.

- Rafael Salgueiro. El sector público español incumple la Constitución. En el mismo artículo, en dos números distintos [el 31.1 y 31.2] está por una parte el establecimiento de impuestos, la obligación de contribuir, con el principio de progresividad. Y por otra se dice cómo hay que ejecutar el gasto público con criterios de programación, equidad, economía y eficiencia. Hemos desarrollado una Agencia Tributaria estupenda en perseguir los ingresos de los que reciben rentas del trabajo, y aún no hemos medido la eficiencia del sector público. Tenemos una cosa que se llama la Agencia para la Evaluación de las Políticas Públicas, que se dedica a aplaudir. Y es fácil. Por poner un ejemplo: el presupuesto del Consejo Audiovisual de Andalucía es comparable al de la Casa Real.

- Grupo Joly. ¿Comparable?

- Rafael Salgueiro. La diferencia ha llegado a ser menos de un millón de euros. El presupuesto para Consejo Audiovisual es más elevado que el del Consejo Consultivo de Andalucía y el Consejo Económico y Social. Los tres son prescindibles.

- Grupo Joly. ¿Arreglaría el déficit aflorar el dinero negro?

- Rafael Salgueiro. Sólo lo podemos hacer de una forma rápida y eficaz a través de una amnistía fiscal. Ya hicieron los socialistas una amnistía fiscal en los años 80...

- Francisco Ferraro. Por acabar con una reflexión positiva; la economía está creciendo, algo menos en Andalucía que en España, pero en los últimos trimestres hay una cierta recuperación. ¿Qué es lo que se puede hacer? Dos cosas. Ajustes en términos de empleo: si 10.000 funcionarios mañana no van a trabajar, probablemente no pasara nada. Y por otra parte, insisto en la necesidad de replantear la política económica micro, que por su dispersión en cantidad de sectores e instituciones provoca disfunciones. Fundamentalmente, la Junta tiene que entorpecer menos, ocupar menos espacio que ahora.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios