El Granada, ya descendido desde hace varias jornadas, acaba la temporada como colista tras perder con el Espanyol en casa (1-2)

Dos goles visitantes en los compases iniciales del choque, uno del brasileño Leo Baptistao y otro del portugués Rubén Vezo en propia meta, pusieron el partido de cara para los visitantes, mientras que el tanto local fue marcado, también en el primer tiempo, por el brasileño Andreas Pereira.

Los ocho primeros minutos resumen a la perfección la esperpéntica y desastrosa temporada del conjunto dirigido por Tony Adams, que cierra su periplo como técnico rojiblanco con siete derrotas en siete encuentros y que ante el Espanyol formó con una defensa de tres centrales y dos carrileros, dibujo utilizado por Lucas Alcaraz y que el inglés criticó cuando le sustituyó.

En el primer ataque visitante, David Lombán quiso despejar de tacón un balón dentro del área y lo que hizo fue dejarlo en la línea de gol, donde Baptistao marcó. En la segunda llegada del Espanyol, un centro del brasileño fue despejado hacia su propia meta por Vezo (0-2, m.8).

El Granada fue capaz de reaccionar porque los visitantes se relajaron y porque tiene a Andreas Pereira, el jugador más destacado y más regular del equipo durante esta campaña caótica.

El brasileño puso a prueba por primera vez a Diego López al cuarto de hora, mientras que antes del ecuador del primer tiempo marcó el 1-2 con un tiro colocado y lejano, diana que contó con la colaboración del meta.

Los locales se crecieron y la escuadra que dirige Quique Sánchez Flores ya no rondó más en el primer tiempo al mexicano Guillermo Ochoa, salvo en un remate de cabeza de Baptistao que acabó en las manos del portero.

Antes del intermedio pudo empatar Andreas Pereira en un lanzamiento de falta directa, pero esta vez sí se encontró con una intervención de Diego López cuando el balón iba a entrar por una escuadra.

En un igualado inicio de segunda parte estuvo a punto de marcar de nuevo Andreas Pereira, mas su gran jugada personal acabó con un disparo que no encontró portería.

Adams renunció a sumar al menos un punto cuando a la hora de partido retiró del campo al jugador brasileño para hacer debutar en Primera a Jean Carlos.

El Granada, no obstante, dominó el encuentro en el tramo final, con el granadino del filial Juan Antonio Entrena como su principal argumento, ante un Espanyol con la mente ya puesta en las vacaciones.

Del equipo catalán no hubo noticias en ataque hasta que en el minuto 72 un buen contragolpe llevado por Baptistao acabó con un disparo que se marchó fuera por muy poco.

Un tiro desviado de Jean Carlos y una buena parada de Diego López ante Isaac Cuenca fueron las últimas opciones de un Granada que acabó la temporada con Ochoa subiendo a rematar un saque de esquina.