TENÍA confianza en que el Granada dejara anoche medio sentenciada a su favor la eliminatoria y no ocurrió por pura mala suerte. Un penalti fallado dos veces, dos tiros al palo, otro buen número de claras ocasiones marradas, un gol legal que Pino Zamorano no concedió… y enfrente un rival que apenas inquietó a Roberto. La acción final de Abel Gómez, que no tiró mal los penaltis sino que se topó con dos grandes intervenciones de Jaime, deja un sabor de boca mucho más amargo que dulce, mas hay motivos para el optimismo: el 0-0 es un resultado aceptable, el Elche no juega un pimiento al fútbol, este año aún no ha ganado a los rojiblancos y, sobre todo, el Granada es mejor, mucho mejor que su oponente, como se demostró ayer en la segunda parte. Si el fútbol es justo y los de Fabri hacen las cosas como deben en el Martínez Valero, el sábado estaremos en Primera.

Hay que estar preparados en la vuelta para un partido sin ritmo, trabado, con pocas ocasiones, feo. El Elche, pese a jugar en casa y necesitar marcar para ascender, como el Granada, seguirá sin arriesgar lo más mínimo. Un gol, para cualquiera de los dos, puede ser decisivo porque tampoco veo a los rojiblancos ganando 0-3. Es comprensible que la moral esté un poco baja tras el fallo del penalti, pero como dijo Fabri para toda España tras el partido "eso ya pertenece al pasado" y ahora solo hay que pensar en que viajamos a Elche con un 0-0 que hay que hacer bueno el próximo sábado en el Martínez Valero.

A Jaime, crecido por su acierto, se le fue la fuerza por la boca tras acabar el choque. El ex portero del Granada 74, que una de las últimas cosas que hizo en el club de Marsá fue liarse a mamporros con un integrante de su cuerpo técnico, debería saber que hoy eres un héroe y mañana puedes ser un villano. Tanto en la tele como en la radio hizo declaraciones inadecuadas y que no se ajustan a la realidad sobre el Granada, sus jugadores y su afición. Cómo me gustaría que dentro de dos días se lo tuviera que tragar todo lo que dijo en ese momento.

La cita con la historia sigue ahí presente, aún no hemos llegado tarde, hemos quedado pra el sábado. Insisto en que la sensación de pesar que todos teníamos anoche, Fabri y jugadores incluidos, debe desaparecer a partir de hoy. Anoche cuando guardé mi acreditación al abandonar el estadio de Los Cármenes dije que "ya la puedo tirar porque no hay más partidos en casa y el año que viene dan otro pase". "Guárdala, o es que no vas a venir el domingo a la fiesta por el ascenso", me preguntó mi amigo Josele. Hay mucho por jugar aún. El ascenso nos espera en tres días. Nos vemos todos el domingo en el estadio de Los Cármenes.