Si hubo un jugador que supo mantener la compostura al término del encuentro, ese fue el guardameta Roberto. El gallego, experto donde los haya, fue golpeado cuando buscaba el túnel de vestuarios, pero no quiso darle más importancia. El portero rojiblanco felicitó sobre el césped del Martínez Valero "a todos los aficionados que son los que verdaderamente se lo merecen. Ya podemos decir que somos de Primera. Estoy muy satisfecho. Hemos sufrido mucho durante todo el año y ahora toca disfrutar. Lo hemos merecido a lo largo de toda la temporada y afortunadamente podemos brindarle este ascenso a la gente".

Sobre los incidentes al términos del partido, señaló que "han sido una pena. Sabíamos que teníamos que irnos al vestuario porque podrían suceder estas cosas pero la emoción del momento nos ha hecho que nos confundamos. Ha habido puñetazos y golpes que no me han gustado nada. Yo he recibido un golpe muy fuerte. No le echo la culpa a los jugadores del Elche, a los que animo para el año que viene, sino que han sido aficionados ilicitanos los que nos han agredido, pero no quiero darle más importancia".

Para Roberto, "el ascenso es justo" aunque quiso recordar su apuesta del pasado verano para fichar por un recién ascendido: "En la vida hay que arriesgar. Sabía que venía a un gran equipo con una gran afición y gracias a Dios somos todos de Primera División, empezando por los jugadores, aficionados y demás colaboradores de la entidad. A mí me han parado muchas personas en la calle diciéndome que nunca habían visto al Granada CF en Primera División y ya la tienen en su mano. Yo he aportado mi piedrita para hacer este gran castillo que nos ha llevado a lo más alto. Estamos todos muy orgullosos por hacer de Granada una ciudad de Primera. Se lo dedico a todos los que me han apoyado y a los que no".

Por su parte, el capitán rojiblanco, Manolo Lucena, visiblemente emocionado, declaró que "no me lo creo. Me siento muy orgulloso de lo que he conseguido pero más aún de como la afición del Granada CF no dejó que este equipo desapareciese cuando parecía que era lo más fácil. Mira ahora donde estamos. Estamos en Primera".

El polivalente jugador granadino, que ha jugado en Tercera, Segunda B y Segunda A, dedicó el ascenso "a mi mujer, mi familia y sobre todo a los rojiblancos". Sobre su futuro señaló que "yo cumplo contrato. A ver que ocurre".