El Ayuntamiento de Granada intentará llegar a un acuerdo con los antiguos propietarios de unos terrenos del Campus de la Salud para cumplir un auto del Tribunal Supremo, que considera que la expropiación que se hizo en 1998, cuando gobernaba Gabriel Díaz Berbel, no se ajustó a la legalidad.

Así lo ha anunciado hoy en rueda de prensa el alcalde, José Torres Hurtado (PP), quien ha asegurado que la cantidad a la que el Consistorio deberá hacer frente -cifrada en 18 millones de euros por la oposición- supondrá un "quebranto" económico para las arcas municipales, que tendrá que asumirse "de la mejor manera posible".

En este sentido, el regidor se ha mostrado "convencido" de que se podrá llegar a un acuerdo con los afectados, con los que, ha dicho, ya había tenido "algún contacto" ante la probabilidad de que la resolución del Supremo les diera la razón.

Torres Hurtado no ha podido precisar de qué forma ni cuándo se compensará a los afectados, aunque sí ha destacado que existe "una buena disposición por ambas partes para llegar a un acuerdo".

El alcalde ha recordado que el hecho de que el Consistorio tenga que hacer frente a una indemnización tras una pronunciamiento judicial "no es nuevo" y ha hecho referencia a casos urbanísticos como el del hotel Alixares, el parque García Lorca o la Plaza de Toros.

Al respecto, ha dicho que el Ayuntamiento ha tenido que hacer frente a "indemnizaciones muy millonarias", con "muchísimo más dinero" que en el caso del PTS, en épocas de gobiernos municipales socialistas, por lo que ha añadido que el PSOE sería el "menos adecuado" para criticar la situación actual.

"Los antecesores en el Gobierno de este Ayuntamiento -'de distintos colores'- me han dejado algunas losas muy importantes que hemos tenemos que pagar", ha lamentado el alcalde, que ha destacado que "hasta ahora" no tiene ningún juicio en su contra por la gestión de su equipo de Gobierno "que suponga ni un solo euro de quebranto al Consistorio".

El popular ha incidido en que "se cuida mucho" de que "los dineros públicos no se derrochen como lo han derrochado anteriormente otros por hacer las cosas mal" y ha dicho que los socialistas, que han advertido sobre posibles consecuencias simulares en relación al Plan General de Ordenación Urbana, "no son precisamente doctores en hacer las cosas bien, como para empezar a criticar al equipo de Gobierno".