"Escuchamos un ruido muy fuerte y seco, como de una avalancha de nieve. Y cuando miramos hacia nuestra derecha vimos a mucha gente caída en la nieve y gritando. Entonces se vivieron momentos de desconcierto, de mucha incertidumbre. Vimos que se habían caído varias sillas...". Este era el relato, aún con el susto en el cuerpo, de Almudena Otero, una gaditana que en la mañana de ayer esquiaba junto a sus amigas en la zona de principiantes de Borreguiles, donde se sitúa el telesilla Emille Allais.

La mañana se presentaba tranquila en la pista, colmada de nieve y con la presencia de bastantes esquiadores, cuando a las 10:18 horas, seis de las sillas de este remonte se vinieron abajo debido a la caída de un balancín (la pieza que une el poste por el que discurre el cable que soporta el telesilla) en la pilona número cuatro. Como consecuencia, 23 usuarios -nueve de ellos permanecen ingresados hoy- se vieron afectados.

Según indicó el director de Cetursa, Mariano Gutiérrez Terrón, catorce de ellos fueron atendidos in situ y evacuados posteriormente a la Policlínica de Pradollano, donde fueron evaluados junto al resto, que se dirigieron hasta el centro por su propio pie o esquiando, ya que sólo estaban ligeramente afectados por la sacudida. El servicio de pistas de Cetursa trabajó en el rápido traslado de los heridos, que se efectuó en menos de una hora. Fuentes de la empresa encargada de gestionar la estación de esquí indicaron que entre los heridos no hay ningún menor ni ningún extranjero. La mayoría de ellos son, según precisaron, profesores de esquí y sus alumnos, muchos de ellos evacuados por sus propios compañeros desde arriba en escaleras.

Pero hasta el remonte, en los primero minutos que siguieron al siniestro, también se desplazaron médicos del Servicio Andaluz de Salud, profesores y alumnos de la estación, efectivos de la Unidad Militar de Emergencias, voluntarios de Protección Civil, Policía Local y Autonómica, entre otros, en un gran dispositivo.

Ya en el centro policlínico de Pradollano, el personal médico se encargó de estabilizar a los heridos -la mayoría sufrían contusiones y fracturas- y de ordenar la rápida evacuación a centros hospitalarios de la capital granadina de tres de los afectados, los que estaban más graves. Tres helicópteros del 061 de Granada y Málaga esperaban, minutos después, en zonas estratégicas, como el Tajo del Zorro, a dos kilómetros de la estación. Fabián Martínez, uno de los pilotos, relataba, acompañado por un médico y una enfermera, que esperaba la llegada de un varón, al parecer en estado "bastante grave" para llevarle rápidamente hasta el Estadio de la Juventud, ya que la zona de aterrizaje de Traumatología no disponía de capacidad para más de un helicóptero.

Según el último parte ofrecido por la Delegación de Salud, los médicos han dado de alta a seis de los quince heridos que a primera hora de la tarde de ayer permanecían hospitalizados en la capital por "distintos traumatismos" tras el accidente. La herida más grave es una mujer de 37 años de edad que se encuentra ingresada en la UCI del Hospital San Cecilio con traumatismo abdominal.

En Traumatología del Virgen de las Nieves, donde había hospitalizados cinco hombres y dos mujeres a los que se les practicaron distintas pruebas para conocer el alcance de sus lesiones, uno de ellos ha recibido el alta y el resto continúa en observación.

En el Hospital San Cecilio, donde fueron trasladados cuatro hombres y otras tantas mujeres, se han dado cinco altas y permanecen la mujer ingresada en la UCI, otra de 33 años que está en observación y un hombre de 33, en planta.