La reconocible y personal marca del pensar poético de Ángeles Mora se hace patente en su último trabajo, Soñar con bicicletas, que ha visto la luz este verano gracias a Tusquets Editores. En este poemario, la escritora cordobesa afincada en Granada ofrece una crítica al mundo que se hace y deshace cada día. Muestra una poesía que piensa, que busca la llama de la razón y la belleza. Se adentra en las profundidades del ser y la existencia, poniendo en evidencia la cotidianidad a veces rota, los miedos y las contradicciones. Un libro dividido en cuatro partes, en el que se vuelven a hacer patentes las preocupaciones de la autora: el paso del tiempo, el amor, la luz que habita la poesía, los rotos que se abren en la propia carne, la intensidad o la emoción del poema, el submundo que ahoga al indivíduo. La mujer toma aquí la palabra para decirse y decir la vida, esa vida que día a día se escapa entre los dedos "como el agua traspasa el colador".

Poesía para transformar la vida

-En su obra 'Soñar con bicicletas' se aprecia una fuerte carga feminista, ¿de dónde viene el título?

-El título del libro pertenece a uno de los poemas que lleva a la esperanza, habla de mi sueño de niña y nos lleva al presente. Esa pieza habla de buscar siempre la luz y no perder nunca la esperanza en el futuro. Como bien sabes, la obra se divide en cuatro partes: la primera habla de los problemas de las mujeres, de la desigualdad que yo he querído romper con mi poesía y derribar esa dicotomía. En la segunda parte, se habla acerca de la luz de la poesía y contiene poemas dedicados a la misma y a poetas como Rosalía de Castro o Lorca, por ejemplo. La tercera parte es Underworld y trata sobre las pesadillas y el dolor de nuestro mundo. Y la última parte, sobre el amor, dedicada a recordar a mi compañero, nuestras conversciones.

Soñar con bicicletas, nuevo libro de la autora

-¿Cuál es su objetivo como autora?

-Pues la poesía para mí es una forma diferente de mirar, de pensar, de enfrentar la desigualdad de género, etc. Creo en la poesía para pensar y transformar la vida, que a través de un poema se nos explique qué está pasando.

''La literatura es vida, es la vida''

-Con una carrera tan exitosa a sus espaldas, ¿podría decir de que se siente más orgullosa?

-Sin duda, de lo que más orgullosa me siento es de haber sido capaz de abrirme camino en un mundo tan comlicado como es el de la literatura. Me siento muy afortunada de llegar al público y muy satisfecha de que se me reconozca y ser considerada tanto por el público como por mis compañeros. La poesía me ha hecho como soy.

-¿Cómo definiría la literatura?

-La literatura es vida, es la vida. Es la manera de entender la vida y el mundo y comprendernos a nosotros mismos.

-¿Cuándo despertó en usted esa pasión por la palabra?

-En bachillerato. Empecé a leer poetas que me gustaban mucho, me afectaban y se me quedaban los poemas grabados en la memoria. Descubrí muchos petas estudiando. Por eso ahora me da pena creer que ahora se considere menos la literatura dentro de la enseñanza.

''La familia me dio alas''

-Finalmente, ¿cómo ha influido su familia en su poesía?

-He analizado lo que es la familia, siempre he recibido mucho cariño por su parte, para mí lo es todo. Es la base sentimental que vive dentro de mí. En mi casa  soms cinco hermanos y yo soy la penúltima, tanto mis padres como mis hermanos siempre nos han mimado muchísimo. Mi padre tocaba la guitarra y eso a mi emocionaba, me daba mucha melancolia. Gracias a él la música es muy importante en nuestras vidas. La familia me dio alas.