Tras la estrepitosa derrota del PSOE en las elecciones municipales y autonómicas, ayer sorprendentemente Sánchez anunciaba la convocatoria de elecciones generales para el próximo 23 de julio. Ya sabemos que Sánchez ha practicado su peculiar Manual de resistencia durante 5 años, y, por fin, le ha fallado estrepitosamente, ¿será esta insistencia en la derrota consecutiva –más que asegurada– una estrategia de resistencia, o será, por el contrario, una aceptación de que su ciclo Frankenstein ha acabado? O será algo distinto: ¿una huida hacia adelante?, ¿una maniobra desesperada para evitar que su propio partido le culpe y evitar un linchamiento por sus críticos, que ya se cuentan por miles?, ¿o será una intentona de que cale el discurso –que no cuela– de que en toda España viene la derecha fascista de PP más Vox? Mucho me extrañaría que Sánchez se rindiese alguna vez ante la evidencia, quizás opine que ahora los suyos reaccionarán contra el avance del fascismo, y que, para el ?10-D, ya estará demasiado quemado.

La sociedad española es mayoritariamente moderada y no está ya para más experimentos estrambóticos, con decisiones y normas estrafalarias, inconstitucionales y antijurídicas que sólo perjudican a la sociedad y que perturban y alteran el orden constitucional y democrático que tanto trabajo nos ha costado construir durante 47 años, para que ahora alguien, cuyo único objetivo ha sido resistir en el poder a costa de lo que sea y de quien sea, siga dinamitando nuestro Estado de Derecho y desmontando nuestras instituciones.

Sorprende enormemente que haya decidido arriesgarse a dejar de ser el protagonista absoluto, el ‘presidente de España’, como le llamaban, y más aún cuando en breve comienza nuestra presidencia de la UE.

Quizás confíe en que esta jugada suicida le salga bien, quizás piense que es el as en la manga de su soberbio ‘Manual de resistenci’a para que su izquierda desnortada, incongruente, aniquiladora y radical siga destruyendo a España y los españoles.

Qué casualidad que García-Page sea el único que se ha salvado del barco hundido, quizás Sánchez debiera haber incluido la moderación y la coherencia en su Manual, aunque eso no suele estar en la ruta del autoritario soberbio.

La sorpresiva cercanía de los comicios generales va a poner a prueba su resistencia/resiliencia, pero este órdago es una oportunidad para la sociedad española, que ya ha aguantado 5 años de sanchismo y se ha aprendido de memoria un Manual anti-Sánchez. Mucho tendrá que andar el PSOE para revertir todo el daño que Sánchez le ha hecho a España y los españoles.