El aumento de fondos del Estado no rompe la brecha entre las autonomías

El Ministerio de Hacienda ha repartido este año “una cifra histórica” de fondos entre las comunidades autónomas para financiar los servicios públicos. La buena marcha de la economía hace que haya más recaudación y, por lo tanto, más dinero para repartir. El problema está en que esa mayor cuantía no resuelve la brecha entre los distintos territorios de España, que se mantiene inalterable porque el “comportamiento” del sistema de financiación autónomico, es decir, las reglas de reparto que se acordaron en 2009, no se han cambiado. Y a la cola siguen estando Murcia, la Comunidad Valenciana, Andalucía y Castilla la Mancha.

Esta es la conclusión a la que llega el informe que firma el mayor experto de España de financiación autonómica, el economista Ángel de la Fuente, director de Fedea, tras analizar los últimos datos de la liquidación del año 2023, la última remesa que han recibido las comunidades en un pago que se ha efectuado hace apenas una semana.

Según consta en la tabla publicada por este instituto económico de referencia, estas cuatro comunidades mantienen las últimas posiciones en la cola de la distribución de fondos, calculados como financiación efectiva por habitante ajustado, con competencias homogéneas e igual esfuerzo fiscal. Así, Murcia, Valencia, Andalucía y Castilla la Mancha tienen una financiación efectiva por habitante ajustado de entre 92,0 y 94,7 sobre una media de cien. En el otro extremo de la tabla está Cantabria que recibe 120,3 ; La Rioja, 113,3 o Baleares, con 112,8. Cataluña está en la media de España, con 101,9, mientras que Madrid se queda ligeramente por debajo, 99,2.

Si se traduce esta tabla a euros, las diferencias de financiación por habitante ajustado entre las comunidades peor financiadas y las que reciben más recursos, son notorias. Andalucía recibió en 2023 un total de 3.208 euros por habitante ajustado, que son 182 euros menos que la media y 869 euros menos que Cantabria, con 4.077 euros. También recibió 634 euros por habitante menos que La Rioja, 600 euros menos que Extremadura, 394 euros menos que Castila y León y 307 euros menos por habitante ajustado que Asturias.

El análisis realizado por el presidente del instituto Fedea establece también que este mayor volumen de dinero enviado a las comunidades hay que ponerlo en relación con lo que subió la inflación, un 3,4%, por lo que se ha producido una reducción de la financiación autonómica “en terminos reales”.

El Ministerio de Hacienda que dirige María Jesús Montero ha hecho públicos todos los datos en la web oficial, detallando los cálculos de tributación y el reparto de los mismos. Es un ejercicio de transparencia y de cuentas claras; se cumple a rajatabla el modelo de reparto de recursos aprobado y que está caducado desde 2014.

¿Quiénes aportan?

En el informe de Ángel de la Fuente para Fedea se realiza otro cálculo que detalla que el actual sistema de financiación aporta a las comunidades de menor renta recursos extra, por encima de sus ingresos tributarios, por un importe de casi 24.000 millones de euros. Estos recursos provienen en parte del Estado (que aporta algo más de 13.000 millones de euros) y en parte de las comunidades con mayor renta per cápita que aportan otros 10.600 millones, de los que el 75% provienen de Madrid (7.795 millones de euros); Cataluña, 2.266 millones; y Baleares, 358 millones.

Las aportaciones a la nivelación suponen entre el 7% y el 8% de los ingresos tributarios autonómicos en Baleares y Cataluña y un 26% en Madrid. En el lado de las comunidades receptoras, las transferencias recibidas por esta vía exceden el 20% de los ingresos tributarios homogéneos en diez casos y son particularmente importantes en Extremadura y Canarias, donde superan el 78% y el 99% respectivamente de la recaudación por tributos cedidos. En total, el sistema de financiación para las comunidades asciende a 152.433 millones de euros.