Dos cordobeses inventan una aplicación para solicitar canciones en bares y discotecas

Emprendimiento

Dos jóvenes emprendedores crean la app Enjoy the club, con la que ya trabajan hasta nueve locales y quieren dar el salto a Madrid

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Álvaro Alonso y Cristian Alberto Sánchez
Álvaro Alonso y Cristian Alberto Sánchez / Enjoy the club
Ignacio Muruve

22 de agosto 2025 - 06:04

Estar tomando una copa con la pareja o con la familia, pero que la música que suene de fondo no sea del agrado. Parece que ese problema se ha solucionado. En una noche de salida con los amigos, que tenga el grupo las ganas de que suene ese temazo que les activa. Parece que esa necesidad está solventada. Álvaro Alonso y Cristian Alberto Sánchez, dos jóvenes emprendedores de Córdoba, han dado con una fórmula para que, en cualquier tipo de contextos, la música sea la que cualquier persona desee en ese momento. Ha nacido Enjoy the club, una aplicación para pedir canciones a los DJ's.

Alonso y Sánchez se conocieron en un Blablacar cuando marchaban en viaje de negocios. Ambos profesan un indudable amor por la música, y ese interés común fue el nexo de unión, el hilo del que tiraron estas dos personas que no se conocían de nada para, ahora, estar unidos en un mismo proyecto. "Yo era antes DJ y productor musical y a Cristian, aparte de ingeniería, que es lo que él estudiaba, siempre le ha gustado mucho la producción musical como a mí. Entonces nos liamos a hablar. Y una semana después, cuando se me ocurrió la idea, decidí contactar al extraño que había conocido en Blablacar", apostilla Álvaro Alonso. Completa entre risas Cristian que "desde ese momento ya somos matrimonio".

La aplicación Enjoy the club tiene un uso sencillo y directo, sin más dificultad que la de decidir la canción que desee la persona pedir. "Cuando los asistentes al local lleguen, van a encontrar nuestros códigos QR en posavasos, carteles y demás pantallas del establecimiento. Cuando lo encuentre la pesona, lo escanea y le redirige a una web ", aclara Álvaro. Un punto importante en el funcionamiento es que la propia aplicación no es para los clientes. "Los que tienen que descargar los administradores y los DJ's", aclara. A partir de ahí, quedan dos opciones dependiendo de la propia decisión del negocio, ya que "en algunos casos serán las propias listas que el local haya querido elegir y no podrán salirse de lo que estas ofrezcan, o la búsqueda libre. El usuario pediría la canción que quiera". La web proporcionaría unos botones en los que pondría solicitar. "Después de ese proceso, el correo electrónico habría que introducirlo. Por ley además, ya que tenemos que emitir factura", menciona Cristian Sánchez añadiendo que "se envían recordatorios y hay una cuenta atrás para ubicar la canción solicitada".

En cuanto a la economía del proyecto, en esta fase inicial, el hecho de pagar por una canción lo determina el administrador. "Dependiendo de los casos, habrá negocios que no pidan dinero y otros que, en su defecto, monetaricen esta nueva forma de decidir la música que se va a poner. En ese caso, Google o Apple Pay serían las plataformas para así poder pagar las cantidades solicitadas", explica Álvaro Alonso. En la feria de Málaga, donde se encuentran estos días, han dispuesto los QR en la caseta Selvática, contando que fue "un exitazo, ya el primer día la gente pidió muchísimas canciones". Como el precio lo pone el local, cuenta que "el otro día quisieron pagar 11 euros por una canción, pagaron muchas por seis euros, otras por cinco".

Los límites de este proyecto van agrandándose conforme pasa el tiempo. Estos dos emprendedores reconocen que han contratado a un comercial para establecer relaciones con clubes y negocios del sector de la noche de forma continuada. "Conocí a un chico que es guía turístico, que le parece una idea estupenda, que le ve mucho futuro y se ha empeñado en ser comercial", comenta el joven cordobés. La estructura del proyecto la encabeza Álvaro Alonso como CEO ya que la idea, desde el principio, fue suya. Cristian Sánchez es ingeniero informátivo y, a partir de ahí, todos los freelance que trabajan con ellos además de tener "a Agustín, por ejemplo, que es actualmente el jefe de venta, que también es inversor", apunta Alonso, que respecto al tema de la inversión, reconoce que lo financiaron como pudieron "de forma autónoma, pero luego sí que hemos cerrado a algunas chicas con inversores. Estamos en plena ronda de financiación ahora mismo".

En cuanto a los territorios conquistados por Enjoy the club, la ya nombrada Málaga es el buque insignia. Hasta nueve clubes cuentan con los servicios de esta pareja de emprendedores. Ahora, lo que está por llegar va a venir desde fuera de Andalucía: "Ya vamos a tener nuestro primer cliente en Valencia y en Madrid tenemos gente interesada", comenta con entusiasmo Cristian. Pensar en cómo hacerlo es de vital importancia. "Estuvimos mucho tiempo entendiendo lo que querían los clientes, entendiendo las discotecas, cómo podían verlo, cómo podíamos ayudar a los DJ, cómo podíamos ayudar a los que no tenían DJ", sostiene Álvaro Alonso. Está previsto que todo este proyecto se traslade a otros contextos, que "esto se podría implantar en cualquier tipo de local de ocio. Por ejemplo, lo queremos poner también en gimnasios, en terrazas de hoteles, en conciertos, etcétera".

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