Tras dos años sin poder celebrar la fiesta de las Cruces de Mayo debido a las restricciones de la pandemia, este año han sido muchos los pueblos de la provincia, empezando por la propia capital, han podido recuperar esta tradición, sin embargo el municipio de Atarfe se ha quedado sin Día de la Cruz por la negativa del Consistorio a otorgar los permisos necesarios para la instalación de barras y terrazas.

Así lo ha denunciado Francisco Álvarez, portavoz de Vox en el Ayuntamiento de atarfeño, haciéndose eco de las quejas de los vecinos que comprobaron con estupor cómo se veían privados de una fiesta tan arraigada. “Son alérgicos a cualquier tipo de celebración religiosa y no les importa poner sus prejuicios ideológicos por delante del bienestar y los intereses de los atarfeños”, ha declarado el edil, refiriéndose al equipo de Gobierno municipal.

Desde la formación también han lamentado que se perjudique de nuevo a un sector tan castigado como el de la hostelería, que esperaba, con la recuperación de esta fiesta, compensar las pérdidas por las duras restricciones a las que se han visto obligados. “De nuevo una decisión política lastra la expectativas de nuestros comercios y de nuestra hostelería”, ha explicado Francisco Álvarez asegurando recoger las numerosas quejas de los hosteleros ante este secuestro del Día de la Cruz por parte del gobierno socialista de Atarfe.

“No es comprensible que el Ayuntamiento organice el calendario de eventos sin tener en cuenta nuestras tradiciones, como es la fiesta de las Cruces”, ha reprochado Álvarez. En este sentido, desde Vox han mostrado su firme compromiso con el fomento y la conservación de fiestas como la del Día de Cruz, que se encuentran firmemente arraigadas entre todos los atarfeños.