La Guardia Civil de Granada ha detenido a un hombre de 29 años, de nacionalidad inglesa y sin antecedentes policiales, como presunto autor de un delito contra la salud pública por tráfico de droga al menudeo, al ser sorprendido en las inmediaciones de una discoteca de La Zubia, en el Área Metropolitana, traficando con éxtasis, MDMA, cocaína, marihuana y hachís. También han sido detenidas otras tres personas por una situación similar en las inmediaciones de una fiesta en Alhendín.

La detención de este joven inglés de 29 años se produjo después de que la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Comandancia de Granada lo sorprendiera en las inmediaciones de una conocida discoteca del municipio de La Zubia traficando con numerosas sustancias estupefacientes.

El ahora detenido estaba dentro de una furgoneta con otros dos jóvenes y se pusieron muy nerviosos cuando los agentes se acercaron hasta ellos para identificarlos. Al ver su nerviosismo, la Guardia Civil los registró y encontró entre las ropas del detenido y en el vehículo, que pertenece a este último, 85 pastillas de éxtasis, 20 dosis de MDMA, una dosis de cocaína, seis dosis de marihuana y 36 dosis de hachís.

La Guardia Civil se incautó de la droga y trasladó al joven hasta el acuartelamiento de La Zubia para instruir diligencias por tráfico de droga, según ha detallado en una nota el Instituto Armado.

En otra actuación similar llevada a cabo en el municipio de Alhendín, la Guardia Civil detuvo a tres personas a las que sorprendieron traficando al menudeo en las inmediaciones de una fiesta por un delito contra la salud pública por tráfico de drogas.

Se trata de un joven de 21 años, al que los agentes del puesto de Armilla descubrieron que estaba traficando con 12 dosis de hachís; una mujer de 26 a la que sorprendieron traficando con 12 dosis de ketamina y una joven de nacionalidad francesa, también de veintiséis años, a la que le encontraron dentro de su vehículo siete dosis de cocaína y siete dosis de MDMA.

La Guardia Civil está especialmente vigilante en el entorno de los lugares de ocio para evitar el tráfico de droga durante los fines de semana, por lo que se incrementan los servicios de vigilancia en discotecas y en las proximidades de aquellos lugares donde se sospeche que se produce tráfico al menudeo de sustancias estupefacientes.