El sabor de nuestras fiestas

La ciudad de Granada se engalana un año más para celebrar su fiesta más emblemática: el Corpus Christi, una semana de luz, alegría y tradición que inunda calles, plazas y corazones. Desde los gigantes y cabezudos al sonido de las charangas, desde el colorido de los mantones hasta la solemnidad de la Tarasca, esta festividad se vive con intensidad, con orgullo… y con todos los sentidos.

Y como cada año, los sabores también cobran protagonismo. Porque si algo define a esta tierra es su capacidad para convertir lo cotidiano en arte, lo tradicional en inspiración, lo sencillo en una experiencia inolvidable. En este contexto, Nordwik, empresa granadina con alma artesana, se une a la celebración con una propuesta irresistible que marida innovación y arraigo, frescura y color, raíces e imaginación.

Este año, Nordwik vuelve a estar presente en las fiestas con todo su sabor, y lo hace con una novedad muy especial que está conquistando paladares: la Paletta de sandía, una propuesta fresca, jugosa y divertida que se suma a su gama más creativa y natural. Elaborada con auténtica fruta y pensada para refrescar hasta los días más calurosos del Corpus, esta nueva Paletta promete convertirse en el capricho favorito de quienes buscan algo diferente, sin renunciar a la esencia del verano granadino.

Una tradición que también se saborea

El Corpus no solo se vive, se baila o se celebra. También se saborea. Porque no hay feria sin un buen helado, ni tarde de calor sin ese toque dulce y refrescante que nos reconcilia con el verano. Nordwik, con décadas de experiencia y sabor a sus espaldas, lo sabe bien. Y este año propone una forma diferente de disfrutar la fiesta: con productos que evocan la esencia de Granada, pero que sorprenden por su autenticidad y originalidad.

Es precisamente de esa idea, la de combinar esencia e innovación, de donde surgen las nuevas Palettas de fruta natural, elaboradas con ingredientes cultivados en su mayor parte en la costa tropical granadina. Sin colorantes ni aromas artificiales, sin artificios ni excusas: solo fruta de verdad, sabor real y un mimo absoluto en cada elaboración.

Fresas, mangos, piñas o limones son algunas de las muchas delicias tropicales que se utilizan para dar forma a las Palettas, siendo la sandía la última en unirse a la familia y que promete no dejar indiferente a nadie. Todo el frescor de la naturaleza presentado en forma de polo artesanal, con una estética tan cuidada como apetecible. Ideales para combatir ese calor seco y alegre que envuelve la ciudad año tras año en estas fechas, y que pide a gritos un helado con personalidad.

Helados que cuentan historias

La apuesta de Nordwik para este Corpus no se limita al producto. Va mucho más allá. Hay una intención clara de conectar con la identidad local, de rendir homenaje a las costumbres granadinas a través de un lenguaje joven, fresco y actual.

La campaña recupera símbolos del Corpus (los colores de los mantones, la alegría de los farolillos, la estética de las casetas, los trajes típicos) para integrarlos en su universo visual. De esta forma, el helado también se convierte en parte del relato festivo, como un complemento más de la feria: tan importante como las flores en el pelo o los farolillos colgando.

Además, los clásicos de la marca que ya forman parte del imaginario colectivo de muchas familias granadinas siguen muy presentes: tartas heladas, conos, bombones, sorbetes, vasitos… Una oferta diversa, de calidad y adaptada a todos los gustos, que demuestra que tradición y vanguardia no solo pueden convivir, sino potenciarse mutuamente.

Sabores que unen generaciones

Porque al final, eso es lo que de verdad importa. En una fiesta tan profundamente intergeneracional como el Corpus, Nordwik apuesta por sabores que evocan recuerdos. La intención no es otra que acompañar a los granadinos en esta celebración y formar parte de esas pequeñas escenas cotidianas que construyen la memoria emocional de una ciudad.

Ese niño que pasea de la mano de su abuelo mientras disfruta de su helado favorito. Esa pareja que comparte una Paletta mientras contempla las luces del Real. Ese grupo de amigos que se refresca entre bailes. Esas sobremesas interminables en familia que acaban en risas, palmas y un postre helado sobre la mesa.

Nordwik no busca ser protagonista, sino fiel compañero. Estar en los momentos que importan. Ser ese detalle que marca la diferencia y hace que lo ordinario se vuelva especial.

Presente en cada rincón

La presencia de Nordwik se hará notar durante toda la semana del Corpus. Desde los lineales de los supermercados hasta los bares, restaurantes y kioscos de barrio, pasando por acciones especiales que se anunciarán en los próximos días, la marca quiere estar cerca, accesible, disponible. Porque el sabor no entiende de clases sociales, de edades o de estilos de vida. Y una buena Paletta, como una buena fiesta, es para todos.

En esta edición del Corpus, Nordwik redobla su compromiso con la ciudad que la vio nacer. No solo como empresa, sino como parte viva de Granada. Y por eso, quiere llenar de sabor no solo los paladares, sino también el ambiente, la memoria, las calles.

El corazón de la fiesta

Porque si en algún lugar quiere tener presencia realmente Nordwik durante estas fiestas, es en el corazón de todos los granadinos que salgan a disfrutar de su ciudad, de su cultura, de su gente y, sobre todo, de sus sabores.

Un Corpus se compone de muchos ingredientes: música, luz, familia, tradición, risas, nostalgia… y también sabor. Ese sabor que nos acompaña desde niños. Ese que refresca y reconforta. Ese que nos hace cerrar los ojos y decir: “Esto es Granada”.

Este año, Nordwik y Palettas te invitan a saborear el Corpus como nunca antes. A vivirlo con intensidad, con alegría y con la ilusión que solo los productos hechos desde el corazón pueden transmitir. Porque las fiestas que más queremos, también se celebran con helado.