El TSJA ratifica la sentencia que obliga a abrir expediente disciplinario a la Universidad de Granada por acoso a una profesora

El fallo del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía puede recurrirse ante el Supremo

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Fachada del Hospital Real, sede del Rectorado.
Fachada del Hospital Real, sede del Rectorado. / R. G.
a.a.

19 de septiembre 2024 - 05:25

La sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha desestimado mediante sentencia el recurso de apelación interpuesto por la Universidad de Granada y seis profesores universitarios al fallo del Juzgado Contencioso Administrativo 2 de Granada de marzo de 2023, que ordenaba a la institución académica abrir y tramitar un expediente disciplinario a raíz de la denuncia por supuesto acoso laboral presentada por la profesora titular de Literatura Hispanoamericana Milena Rodríguez Gutiérrez. La docente denunció un acoso de más de diez años dentro de su propio departamento y pidió que se adoptaran con urgencia las medidas de investigación y de protección necesarias para que éste cesara.

La profesora recurrió a los tribunales después de una resolución de la rectora Pilar Aranda en el que se cerraba el expediente informativo abierto ya que se decidió por parte de la Universidad que no se deducían indicios de infracciones disciplinarias. La sentencia de lo Contencioso Administrativo número 2 dio la razón parcialmente a la docente pero la UGR apeló. Ahora la sentencia del TSJA da de nuevo la razón a Milena Rodríguez y desestima las alegaciones de la UGR y el resto de apelantes. La primera sentencia ordenaba a la Universidad a incoar y tramitar el correspondiente expediente disciplinario, que determinará si se produjo o no el presunto acoso laboral que denunciaba la profesora.

La estimación en aquella sentencia fue parcial dado que no se atendió la petición de la demandante de que se declarara la existencia de acoso laboral y medidas disciplinarias. Sí se dio la razón en la petición de que se abriera un expediente que analizara la denuncia de supuesto acoso.

Tras la apelación de la UGR, el TSJA es claro en su sentencia, que se puede recurrir ante el Tribunal Supremo, donde cabe interponer recurso de casación. Según el fallo, al que ha tenido acceso este diario, "no es aceptable que en esa fase preliminar" se cerrara el expediente informativo, en que se consideraba que no existía acoso. Señala el TJSA que se daban en esa resolución de la rectora "apreciaciones y juicios de valor" sin que se hayan practicado las pruebas "que cada interesado quiera hacer valer y resulte procedente y previa ponderación de su resultado por el órgano sancionador".

La sentencia recoge que en la resolución de la Universidad "dictada tras solo esa fase inicial" se considerara que "la denuncia formulada solo vislumbra un mal clima" en el trabajo.

El abogado de la profesora que denunció un presunto caso de acoso laboral, Antonio Sánchez, indica que la sentencia en primera instancia ya determinaba que la actuación de la Universidad de Granada era "contraria a derecho" y que "había elementos suficientes para indagar sobre estos hechos". "La conclusión es que hay hechos que pueden ser muy graves y la Universidad ha mirado para otro lado", explica el letrado del despacho Desler Abogados, que destaca que mientras ha llegado esta sentencia una de las profesoras apelantes "ha pasado a ser decana". Antonio Sánchez también hizo hincapié en la "actitud pasiva" mantenida por la Universidad durante el caso.

Por su parte, la profesora Milena Rodríguez manifestó que "estoy muy satisfecha con la reciente sentencia del Tribunal Superior de Justicia, pero como dije en una reunión en el Rectorado cuando salió la sentencia anterior del juzgado, la del 8 de marzo de 2023, el daño ya está hecho, y es muy grave, en lo personal, en mi salud, en mi familia, en mi carrera académica, en mi imagen y en mi reputación (dentro y también fuera de la Universidad de Granada), y además este daño continúa, porque las conductas acosadoras no han cesado y no se ha hecho nada para que cesen. Mi decepción con la Universidad de Granada es muy grande, como profesora de esta institución, como mujer, como inmigrante y como latinoamericana". 

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