Las gambas rebozadas son un placer crujiente (además de irresistible) para los amantes del marisco. Con su exterior crujiente y dorado que se rompe al morderlo, estas delicias son perfectas como aperitivo o como segundo plato. No solamente están deliciosas, sino que son sencillas de preparar en casa. Si quieres comprobarlo por ti mismo y disfrutar de unas gambas jugosas y crujientes en tu cocina, estás en el lugar correcto. Hoy, vamos a preparar gambas rebozadas crujientes: ¡prepárate para chuparte los dedos tras cada bocado!

Lo primero, como siempre, será tener todos los ingredientes a mano sobre la encimera. Así, nos será más rápido y sencillo dispones de ellos a medida que elaboramos nuestra receta:

• Gambas frescas y peladas (cantidad deseada).
• Harina de trigo.
• Huevo batido.
• Pan rallado (preferiblemente panko).
• Sal y pimienta al gusto.
• Aceite vegetal para freír.
• Limón (para servir).
• Perejil fresco picado.

Una vez hayamos reunido los ingredientes, podemos comenzar con la elaboración:

1. Preparación de las gambas: Lo primera será asegurarnos de que las gambas estén peladas, desvenadas y limpias. Puedes dejarles la cola para poder comerlas con mayor facilidad.

2. Preparación de los ingredientes para rebozar: Prepara tres recipientes poco profundos: uno con harina, otro con huevo batido y un tercero con pan rallado. Sazona el pan rallado con sal y pimienta al gusto.

3. Rebozar: Sumerge cada gamba primero en la harina, asegurándote de que esté bien cubierta. Luego, pásala por el huevo batido para que quede bien empapada. Finalmente, reboza la gamba en el pan rallado, presionando suavemente para que el pan rallado se adhiera bien a la gamba.

4. Freír: Calienta suficiente aceite vegetal en una sartén profunda a fuego medio-alto. Una vez que el aceite esté caliente, agrega las gambas rebozadas con cuidado. Fríelas durante 2-3 minutos por cada lado, o hasta que estén doradas y crujientes.

5. Escurrir y reposar: Una vez que las gambas estén doradas, retíralas cuidadosamente de la sartén y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.

6. El toque cítrico: Exprime un poco de jugo de limón fresco sobre las gambas rebozadas crujientes justo antes de servirlas. Esto añadirá un toque cítrico que resaltará los sabores marinos.

7. Decoración: Espolvorea perejil fresco picado sobre las gambas rebozadas crujientes como toque final. Esto no solo agregará un color vibrante, sino también un aroma fresco y delicioso.

Consejo: Sirve las gambas rebozadas crujientes con una salsa tártara, salsa de ajo o salsa picante para sumergirlas.