El día se levantó nublado, plomizo, y aunque no hiciera demasiado calor, las nubes siempre provocan que la sensación térmica sea mayor y que el aire no circule. A pesar de ello, a las actividades que estaban programadas para la Feria del Corpus asistieron decenas y cientos de personas y el ferial estaba muy animado y lleno de lunares.

Hacia las doce de la mañana un conjunto de moteros, algunos enfundados en cuero a pesar del persistente calor, se reunían en el Paseo del Salón para hacer un recorrido por la ciudad a lomos de auténticas joyas clásicas de dos ruedas, organizado por el Club de Motos Clásicas de Granada. Poco más tarde, las ruedas de caucho dejaron paso a los cascos de los caballos en la exhibición de enganches, que partieron desde el mismo punto que las motos y discurrieron por toda la ciudad hasta llegar al ferial.

La Feria no es sólo el ferial, también muchas de las actividades que tienen lugar durante esta semana grande se celebran en el centro de la ciudad. La plaza del Carmen estuvo ocupado por cortadores profesionales de jamón en el Concurso Nacional de Cortadores de este manjar. Una cola de gente se metía en calle Navas a la espera de un plato de jamón que con mimo y esmero era depositado por estos profesionales. Mientras tanto, la réplica de la portada del ferial (La Puerta de las Granadas) frente al Ayuntamiento era la protagonista de fotos y autofotos de los transeúntes. Tanto propios y ajenos.

El ferial presentaba un estado impecable a pesar de que la noche anterior fue el comienzo de los festejos. Hacia el mediodía, y aunque el calor plomizo fuera un poco sofocante la mayoría de las casetas estaban aceptablemente llenas de gente. Al pasar por unas de las casetas se escuchaba “La leyenda del tiempo” de Camarón, de hecho, se cumplen cuarenta años de la leyenda del Tiempo, el disco que Camarón, contra viento y marea se propuso hacer.

Aunque este disco es considerado uno de los grandes hitos de la música nacional, junto a Omega de Lagartija Nick y Enrique Morente, entre otros, en su momento no fue entendido por los flamencos más puros. Pasado el tiempo, este trabajo musical se ha convertido casi en un mito. Alguien sabría de esta efeméride y quiso recordarlo en el Corpus Christi. Las canciones de la “Leyenda del Tiempo”, están inspiradas, como no podía ser de otra manera, en obras de Federico García Lorca.

Se sentía un ambiente muy familiar al mediodía en el ferial, se podían ver muchas niñas enfundadas en sus trajes de gitana correteando por las calles del recinto, levantando los brazos y haciendo gestos que podían asemejarse a los de unas sevillanas. Algunas, con gracia conseguía gracia coger, morder y soltar la manzana.