El número de personas que muestran interés por aunar el deporte y el cuidado del medio ambiente es cada día mayor. Una tendencia que hace algunos años dio lugar a nuevas actividades deportivas que permitían la realización de lo mejor de estos dos mundos con la creación del plogging. Una actividad deportiva, que surgió en la capital de Suecia y que pronto se extendió por todos los rincones del mundo, promovido por grandes grupos de personas que querían aportar su granito de arena a mejorar el medio ambiente. Un movimiento que promueve hábitos de vida saludable y que además sirve para conocer a gente con tus mismos intereses.

Una actividad que en el caso de la Costa de Granada cuenta con embajadores como la Fundación Miguel García Sánchez y el Grupo La Caña, que organizan circuitos por distintos enclaves de los litorales granadino, almeriense y malagueño, en el que suelen participar centenares de personas dispuestas a realizar rutas de senderismo, conocer gente nueva y limpiar todo lo que se encuentran a su paso.

En este sentido, la Fundación ha iniciado su segundo circuito de plogging, que consta de ocho pruebas diferentes, en las que se va a proceder a la limpieza de residuos inorgánicos de entornos naturales situados en distintos puntos del litoral, de las que seis se hacen en la costa granadina (Salobreña, Torrenueva Costa, Motril, y en dos ocasiones en Gualchos- Castell de Ferro), una en la malagueña (Nerja) y otra en la almeriense (El Ejido).

Este programa, que es innovador y muy social, cuenta con la colaboración de las empresas Caña Nature del Grupo La Caña y Koppert España, así como el patrocinio de Caja Granada Fundación y Caixabank al haber sido seleccionada en la 'I Convocatoria de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible' que sacaron dichas entidades.

Se trata de una actividad que "resulta muy barata de realizar al precisar tan sólo unas buenas zapatillas deportivas y una bolsa para juntar la basura recogida". Pero que hace que la gente que lo practica se sienta a "las mil maravillas y satisfecha con los realizado, a la vez que ayudas a mantener el medio ambiente en las mejores condiciones posibles", explica a Granada Hoy la bióloga, María José López Leyva, una de las participantes de este circuito.

"Es una actividad que se celebrará bajo los protocolos y medidas de seguridad establecidas por las autoridades sanitarias, y que cumple un triple objetivo: reciclar, hacer deporte y conocer a gente nueva, a la vez que está pensada para que la haga todo el mundo, desde los más pequeños a los mayores, sin necesidad de ser un gran deportista, sino simplemente tener ganas de pasarlo lo mejor posible", añade López Leyva.

Y señala que es "una actividad muy familiar e ilusionante en la que te invitan a salir por los entornos naturales cercanos y de esa forma colaborar con dejarlos lo más limpios posibles", de igual forma "es una ayuda a la naturaleza".

Dos participantes retirando un plástico de invernadero

Aunque tiene su parte negativa. Latas, botellas, plásticos de cubierta de invernadero, gomas de goteros, las posibilidades son infinitas, y evidencian el mal uso que hacen las personas del entorno. "Hemos encontrado de todo, colchones, diferente mobiliario de una casa, e incluso en una jornada localizamos un coche entero desmontado, que además sabemos que sigue en el mismo sitio porque nosotros no pudimos retirarlo y nadie ha hecho por quitarlo", lamenta. 

Por su parte, el director de la Fundación Miguel García Sánchez, Samuel Ortega, explica que el objetivo principal es la "realización de rutas de senderismo con la que se limpian entornos naturales como son ramblas, bosques u otros parajes de residuos inorgánicos", y a la vez "el lanzar un mensaje adecuado para concienciar a la sociedad en general, y sobre todo a los niños, de la importancia que tiene el mantener limpia la naturaleza".

Una cita indispensable que volverá a celebrarse el próximo 5 de febrero en Castell de Ferro para seguir limpiando el entorno, por lo que invitan a todos los interesados en conocer este deporte en auge en España a participar y pasar un día en la naturaleza.