Pescadores de la Costa de Granada preparan una concentración a principios de noviembre para mostrar su preocupación tras el anuncio realizado por la Junta de Andalucía de la regulación de la pesca profesional y deportiva, además de actividades náuticas como el submarinismo, en la zona especial de conservación (ZEC) acantilados y fondos marinos de la Punta de la Mona y de Calahonda- Castell de Ferro. Una norma que, de hacerse efectiva, provocaría que los usuarios de la zona que se dedican a estas prácticas tengan que buscar un nuevo lugar alejado del tramo.

Situación que no sentó bien a los usuarios de estas prácticas deportivas que piden a través de las redes sociales el apoyo de los distintos sectores para realizar una manifestación pacífica que tendrá lugar en la plaza del Ayuntamiento de Almuñécar "en protesta por el inminente cierre de los acantilados".

Según el proyecto de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, que está en fase de información pública, en la zona catalogada como ZEC, el plan de gestión detectó una serie de presiones y amenazas que "ponen en riesgo la conservación del espacio en su conjunto, y de los arrecifes en particular, así como la supervivencia de determinadas especies".

En el escrito se puntualiza que, entre las presiones y amenazas detectadas por los actores implicados, la pesca profesional, deportiva, así como el buceo y el esnórquel, son algunas de las actividades que más daño están provocando en el litoral, con "una pérdida significativa de los elementos prioritarios de conservación", y "causando daños en gran parte de las comunidades invertebrados", alegando que son producidos principalmente por el uso y abandono de los métodos utilizados en la captura, los amarres de las propias embarcaciones o el propio contacto de los buceadores, entre otros.

Por otro lado, reseña la cercanía del puerto deportivo Marina del Este, colindante con la ZEC por su límite nororiental, que tiene una capacidad para más de doscientos atraques, por lo que propicia el tránsito marítimo de numerosas embarcaciones y el frecuente fondeo incontrolado de algunas de ellas con el consiguiente deterioro de los fondos marinos.

Además, señala que el Programa de Gestión Sostenible del Medio Marino Andaluz, informa sobre las afecciones en el entorno marino, así mismo la Universidad de Granada mediante diversos escritos, muestra su preocupación por el estado de deterioro presente en la zona.

Entre otros motivos se encuentra el aumento de actividades náuticas como kayaks, piraguas o vehículos sin motor que "llegan a producir aglomeraciones en áreas especialmente sensibles" poniendo en riesgo "la conservación de las especies marinas propias del área intermareal".

De hecho hay varias oenegés y asociaciones que realizan quedadas periódicas para limpiar los ecosistemas marinos e intentar minimizar el impacto ambiental en el medio, como el Grupo Marinas del Mediterráneo, entidad que gestiona la concesión de los puertos deportivos de La Duquesa (Manilva) y Marina del Este (Almuñécar), el Club de Actividades Subacuáticas La Espera o la ONG andaluza Equilibrio Marino, que localizó en la Punta de la Mona un ecosistema con cientos de corales rotos por la gran concentración de artes de pesca abandonados y que creó la primera guardería de corales del Mediterráneo en la zona de especial conservación de los Acantilados y fondos marinos de la Punta de la Mona, en Almuñécar-La Herradura.

La Consejería abrió un periodo de alegaciones para que aquellas administraciones o particulares que quieran presentar sus quejas o hacer llegar sus opiniones sobre las medidas planteadas puedan hacerlo hasta el 16 de diciembre de 2021, que se cerrará el plazo de recepción para valorar las propuestas.